CAMAGÜEY.- Con motivo del aniversario 200 del natalicio del lugareño Joaquín de Agüero y Agüero, este 15 de noviembre los camagüeyanos dedicamos pensamientos y palabras al insigne patriota.

Porque aunque no es suficiente con una mañana de agasajos, la recordación de su legado independentista siempre resulta acto sensato, sobre todo para las bisoñas generaciones. Dice mucho sobre su temple la decisión de dar libertad a sus ocho esclavos en el temprano 1843; o la de fundar una escuela pública gratuita en la localidad de Guáimaro, la cual sostuvo con dineros y con lecciones.

A la plaza que lleva su nombre concurrieron pioneros de primaria y secundaria básica, así como combatientes y trabajadores de la comunidad, para regalarle canciones, poemas, compromisos... En la ocasión seis nuevos miembros ganó el Partido Comunista de Cuba.

Además fueron evocados sus compañeros de causa Fernando de Zayas, Tomás Betancourt y Miguel Benavides, quienes también murieron fusilados por el régimen español el 12 de agosto de 1851, en la hoy plaza Joaquín de Agüero.

Conocido por muchos como un prócer de la independencia Agüero y Agüero merece mayor protagonismo en el estudio de la Historia de Cuba; la trascendencia de su accionar no se agota en los límites del Camagüey. Libertar a la Patria grande, no solo la chica, fue su desvelo.