CAMAGÜEY.- Resulta muy difícil llegar a un hospital y recibir la impresión de que todas las personas están felices. Si se trata de uno especializado en Oncología, como este caso, el María Curie, de esta ciudad, podría asombrar más; sin embargo, ese sentimiento fue real y lo viví hoy.

En los festejos por el cumpleaños 90 del Líder Histórico de la Revolución cubana no podía permanecer ajeno el sector de la Salud Pública, ese que desde sus primeras inquietudes de lucha, luego en la Sierra Maestra, en su alegato de defensa después del Asalto al Cuartel Moncada, y en su vida toda, ha estado presente con visión de futuro, esa que lleva su impronta en cada pueblito o ciudad olvidados antes de 1959, con un ejército de batas blancas como su mejor huella.

Entre las 32 obras terminadas en la provincia impulsadas por ese sentir y los 23 objetos en diversas edificaciones, estuvo la entrega allí del Tomógrafo Axial Computarizado (TAC) de 16 cortes, a un costo de 690 777 pesos, por concepto de equipos y gastos en la construcción del departamento concebido con las especificidades requeridas.

En esta ocasión, donde ondeaban banderas cubanas, banderolas, estuvieron directivos del Partido y el Gobierno a nivel provincial, se supo que en breve contarán con un equipo de Cobalto 60 (emite rayos gam­ma y es el isótopo que más se utiliza en radioterapia), otro de Braquiterapia (tratamiento radioterapéutico donde isótopos radioactivos se colocan dentro o cerca de la zona que requiere tratamiento), una Cámara Ganma (dispositivo de captura de imágenes, comúnmente utilizado en medicina nuclear como instrumento para el estudio de enfermedades).

Además, se ofrecieron detalles de otros beneficios para trabajadores y enfermos, como serán instalaciones destinadas a las consultas externas y un hospedaje con 50 camas para personas que reciben las radioterapias y viven lejos de la ciudad, estas últimas a un costo que sobrepasa el millón de pesos.

Fidel, llamado por muchos como el Médico de almas, que tuvo la visión de garantizarle a cada cubano el derecho gratuito a los servicios de la Salud, también vislumbró que los profesionales y técnicos de este país colocaran, y en mucho, su granito de arena en pos de la salud de los más desfavorecidos de este mundo.

En el “María Curie” no se olvidó un solo detalle. Reconocieron el trabajo del personal de varias entidades como: del Centro de Ingeniería Clínica y Electromedicina (inaugurado por Fidel en 1987), de Etecsa, la Obe, la Epia 11, la de Industria de Materiales de la Construcción, Copextel, Epase de la Salud, y a cuentapropistas, entre otros. El destacado artista de la plástica Carlos Wambrug, entregó una obra de su autoría, de un paisaje con líneas que reflejan su relación con la escultura, y en la que a mi modo de ver, lleva implícito una percepción de vida, optimismo y futuro.