SIERRA DE CUBITAS, CAMAGÜEY.- La cantera Vietnam Heroico, asentada en las inmediaciones de esta serranía y visitada por Fidel el 13 de julio de 1971, restablece de nuevo su flujo productivo, tras un proceso de reparación capital que incluyó todo el sistema eléctrico, considerado por expertos como una proeza laboral al emplearse solo 20 de los 60 días calculados.
Las fuerzas movilizadas de varias instituciones de la provincia posibilitaron que luego del ineludible colapso de la industria por falta de mantenimiento, la instalación esté en óptimas condiciones para producir entre 650 a 700 metros cúbicos de áridos en jornadas de 13 horas diarias, cerca de la mitad de arena de resistencia, sostuvo el director de la Unidad Empresarial de Base de Áridos Sierra de Cubitas, Jorge Luis Hernández Umpierre.
Foto: Otilio Rivero Delgado/Adelante
De este enclave sale la arena artificial, hormigón, granito, gravilla, macadán, base pétrea y rajoncillo, de primera calidad para obras hidráulicas, ingenieras, sociales, del turismo y hacia los puntos de venta de materiales de la construcción para la población a través de la red de Comercio Interior.
En el acto, que dio por concluida la jornada de esfuerzo decisivo, el trabajador Moisés Guilarte Rodríguez, anunció que en los meses transcurridos del 2016 acumularon 42 mil metros cúbicos de piedra, más de 11 000 de arena artificial, una cifra superior a los 500 mil bloques de hormigón y 15 mil metros cuadrados de elementos de piso.
Foto: Otilio Rivero Delgado/Adelante
La diputada Isabel González Cárdenas, presidenta de la Asamblea Provincial del Poder Popular, al dirigirse al colectivo y a sus familiares, a pocas horas de conmemorarse el aniversario 63 de los históricos asaltos a los Cuarteles Moncada, de Santiago de Cuba, y Carlos Manuel de Céspedes, de Bayamo, destacó la importancia del centro para el desarrollo inversionista y que el principal reto ahora es mantener la atención de la tecnología que respalde los planes de producción.
El miembro del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y primer secretario en Camagüey, Jorge Luis Tapia Fonseca, presidió la ceremonia, después de apreciar los trabajos que hicieron posible la arrancada estable de la industria.
