Camagüey.- Cada año los camagüeyanos y todos los cubanos realizamos un ejercicio de la Defensa Civil que aquí se conoce por Meteoro, término que en la gramática española hace alusión a los fenómenos atmosféricos asociados a los vientos, la lluvia o la nieve, a los rayos y el fuego, entre otros.
Este evento cumple precisamente ahora su Aniversario XXX y puedo asegurar a los lectores de Adelante digital en el planeta, que llegó para quedarse. De por vida lo hacemos con el inicio de la temporada ciclónica, que comienza el 1 de junio y se extiende hasta el 30 de noviembre, pero no sólo nos prepara para enfrentar los poderosos huracanes que se forman y desarrollan en septiembre y octubre en el Mar Caribe, el Golfo de México y el Océano Atlántico.
Terremotos y maremotos también pudieran azotarnos – si tenemos en cuenta la posición geográfica de la parte sur oriental de la Isla – como el de magnitud de 7,8 en la Escala Richter, que arrasó el pasado sábado 16 de abril en horas de la noche gran parte de la costa ecuatoriana dejando cientos de muertos, desaparecidos y mutilados. Por eso las máximas autoridades del Estado tienen muy presente el paralelismo de Santiago de Cuba y sus provincias vecinas con el sistema de falla Bartlett Caimán.
A partir de las experiencias derivadas en los últimos años el Consejo de Defensa Provincial, el Gobierno, las Empresas y Entidades, la Defensa Civil junto a las Fuerzas Armadas y el Ministerio del Interior, fortalecen sus capacidades para si se presenta una intensa sequía o desastres de origen sanitario, y para ello aplican estudios de peligro, vulnerabilidad y riesgos de acuerdo a las particularidades de cada territorio.
Otro aspecto importantísimo es ejercitar a periodistas y especialistas de la información, la economía y las comunicaciones, a los profesionales en cada uno de los centros de salud junto al personal de la Cruz Roja, quienes están encargados de capacitar a las diferentes categorías de la población en primeros auxilios, rescate, socorrismo y otras normas de conducta a seguir en situaciones de desastre.
Por ello el Ejercicio Meteoro prevé numerosas acciones en cuanto a la higienización y disposición final de residuales líquidos y solidos, así como criaderos de mosquitos y otros vectores transmisores de enfermedades infecto contagiosas que están haciendo estragos en varios países de nuestra área geográfica.
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