En la industria camagüeyana repararon el piso de la sala de maquinado de soya, y se les dio mantenimiento al sistema de frío y al de vapor, “y lo más importante es que se trabajó fuerte en martillo y el colador para la soya, lo cual repercutirá en un yogur de más calidad”, dijo José Rivero Casellas, director del Combinado Lácteo.

En la “Pasteurizadora”, como se conoce popularmente la fábrica, iniciaron los arreglos el 28 de marzo, y debían extenderse hasta el 21 de abril.

“Pero cuando iba a arrancar se rompió el compresor de aire, y nos retrasó, además coincidió con una rotura del compresor de frío en la planta de Florida, que junto a Ciego de Ávila se dispusieron como suministradores alternativos para la ciudad de Camagüey”, informó Alexis Gil Pérez, director general de la Empresa de Productos Lácteos de Camagüey.

El directivo también explicó que: “Como solo tuvimos el yogur de soya de Ciego lo destinamos a la merienda escolar, pues Florida hace poco más de una semana que está de alta, con el compresor cambiado y el sistema de frío reparado”.

Después del percance con el compresor de aire, dos días más tarde los trabajadores de la “Pasteurizadora” tuvieron que ingeniárselas con el motor de un molino. “En la jornada del miércoles 4 de mayo pudimos suministrar yogur de soya, leche para los niños de hasta 6 años y yogur natural, pero ese mismo día se nos rompió el diafragma de las bombas sanitarias, que restablecimos hoy”, aseguró Rivero Casellas.

El Combinado Lácteo de Camagüey produce más de 600 toneladas mensuales de leche y derivados lácteos, cifra que lo convierte en la mayor industria de su tipo en la provincia.

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