En Camagüey el 78% de las producciones descansan en manos de los campesinos, en su mayoría acogidos al usufructo de tierras, por eso el aumento del precio de la leche incentiva a mayores acopios, algo complejo si se tiene en cuenta la carencia de recursos con que disponen estos ganaderos.

Las lluvias de finales de año y de enero unido a la recuperación de más de 300 tranques, sobre todo en los municipios de Guáimaro, Sibanicú y Jimaguayú, favorecieron las producciones, que a finales del primer cuarto del 2016 rondaron los 15 000 000 de litros, lo cual representa más de 3 777 000 de litros por encima de lo planificado para este período, el más seco del calendario.

“El cumplimiento de la siembra de las 9 786 hectáreas para pastos y forrajes planificadas el año pasado nos ha permitido superar el doble de los kilogramos (Kg) diarios que consumen las reses, hoy oscila entre 16 y 18 Kg per cápita, en el 2015 la relación era de 7.6 Kg por cabeza”, explicó Reinaldo Martínez González, especialista de ganadería de la delegación provincial del Minag.

Jimaguayú, Guáimaro y Camagüey lideran en el ordeño, y solo dos empresas de la provincia incumplen con la entrega a la industria, la Ganadera y Maraguán.

Tales resultados le permitieron a la Empresa de Productos Lácteos de Camagüey (Emplac) sobrepasar sus producciones, incluyendo las entregas de las 57 toneladas mensuales a la Gastronomía. “No obstante, los volúmenes de leche no bastan para mantener, como pasaba hasta hace unos meses, el mismo nivel de abastecimiento, por ejemplo, de queso a Comercio. Somos un pilar fuerte en el balance nacional y por eso suministramos a Holguín y Granma, además del compromiso con el mercado en divisas”, argumentó Alexis Gil Pérez, director general de la Emplac.

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