Como parte de una estrategia coordinada en toda Cuba para reducir los índices de infestación por mosquitos Aedes aegypti y albopictus, la campaña cuenta con el apoyo de todos los organismos, empresas y entidades que cuenten con medios apropiados para la recogida de desechos.

Ever Ávalos, director provincial de Servicios Comunales, informó que la higienización ambiental se desarrollará simultáneamente en todo el territorio, pero de forma organizada por Consejos Populares, para concentrar los recursos en función de una mayor calidad de la limpieza.

El objetivo es que luego de la extracción y recogida de los residuos de los interiores de casas y patios, cada área quede certificada como limpia y se mantenga de esa manera lo cual, además, requiere del apoyo y la responsabilidad ciudadana, enfatizó el directivo.

La participación social es fundamental para proteger la salud colectiva y, además, evitar el gasto excesivo de recursos, pues se calcula que en la actual campaña se consumirán 70 mil litros de combustible y costará entre cinco y siete millones de pesos, argumentó Piñera.

Precisamente, la higiene ambiental sustentable ha sido durante varios años un problema en Camagüey, uno de los territorios en el país más comprometidos por la presencia del mosquito Aedes, actualmente con un índice de infestación de 0,48, cuando el máximo permisible es de 0,05.

El teniente coronel Félix Villegas, jefe del órgano de la Defensa Civil provincial, facilitó ese dato, y acotó que lo principal es cortar todas las vías para la trasmisión de virus y otras enfermedades.

Señaló que a la campaña de limpieza, que durará hasta mediados del mes de marzo, se suman otras medidas como la vigilancia sanitaria en aeropuertos, terminales y otras fronteras, mediante el chequeo de temperatura y el aislamiento de personas con síntomas sospechosos.

También se mantendrán los ciclos de fumigación y control focal, de manera intensiva, para eliminar a los insectos tanto en su etapa adulta como en estado larvario.

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