Roberto Barreiro, encargado de la comercialización en la entidad, informó que desde julio el comportamiento de la puesta está en correspondencia con la masa animal en las granjas, y agosto muestra mayores resultados diariamente.

Con esta situación será posible mejorar la distribución a los mercados que venden el producto liberado y a las dependencias gastronómicas, expresó.

En el transcurso del actual 2015 la empresa comercializó más de 45 millones de unidades, cifra que incluye envíos realizados a La Habana y también compras a otras provincias, cuando ha existido déficit en el territorio.

Aparte de los contratiempos con el abastecimiento de pienso, la entidad afronta otros problemas, como, por ejemplo, deficiencias en el manejo de la masa avícola, dificultades con el transporte y falta de suficientes cartones para recoger los huevos en las naves de producción.

Camagüey distribuye mensualmente alrededor de tres millones 500 huevos por la canasta familiar, mientras la otra variante de venta se mueve por los seis millones, pero depende de la producción y de las compras.

Cuba vende a precio fuertemente subsidiado (a 15 centavos por unidad) cinco huevos per cápita cada mes a su población y liberado a 1.10 pesos, además de abastecer a centros hospitalarios y docentes y comedores obreros.

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