CAMAGÜEY.- Más de 100 viviendas han sido electrificadas en la zona norte de la provincia gracias a una donación de la Unión Europea y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, a propósito de los estragos causados por el huracán Irma en el año 2017.

Nuevitas, Minas, Sierra de Cubitas y Esmeralda fueron los municipios beneficiados con estos sistemas fotovoltaicos que superan los 340 en territorio agramontino y “son los mejores sistemas aislados que han entrado al país”, según declaró a la prensa Juan Carlos Lacaba Jofre, especialista principal en Operaciones y Mantenimiento de la UEB Fuentes  Renovables de Energía.

“Tienen una potencia de 2000 W, muy superior a los 250 W de los instalados anteriormente; admiten cargas inductivas, es decir, equipos con motores como ventiladores, lavadoras, refrigeradores; y cuentan con baterías, por lo que no importa que llueva o baje la intensidad de la luz solar, ellos acumulan para toda la noche”, explicó.

La nueva tecnología ha llevado la luz a hogares que no la recibían por ninguna otra vía, con prioridad a las madres solas a cargo de tres o más hijos, viviendas en mal estado constructivo, familias en situaciones de vulnerabilidad.

Entre los primeros en recibir el servicio estuvieron los habitantes de la localidad La Veguita, en el municipio de Esmeralda, donde funcionaba un grupo electrógeno que no cubría el servicio eléctrico las 24 horas.

Paralelamente se desarrolla el programa Lemi, que se extiende a otros territorios como Guáimaro, Vertientes y Santa Cruz del Sur y fundamentalmente sustituirá los sistemas montados entre los años 2016 y 2018, cuando Camagüey se ubicó en el cuarto lugar entre las provincias que más sistemas fotovoltaicos instalaron en viviendas no electrificadas, con 1928.

Aunque estos tienen una potencia más débil (300 W), no admiten cargas inductivas ni cuentan con baterías, dan la posibilidad de electrificación a viviendas que están en lugares donde no se puede llevar una línea eléctrica.

Ambos programas contribuyen con el propósito de acelerar el desarrollo de las Fuentes Renovables de Energía en el país, que además de la fotovoltaica también explota la biomasa cañera, la energía eólica y la hidroenergía.

A partir del funcionamiento de los seis parques solares instalados en Camagüey, cuyo aporte es ínfimo (12,2 mW) para la demanda del territorio (160 mW), hasta el cierre de agosto se ahorraron 2 946 400 toneladas de combustible y por lo tanto, se dejaron de emitir a la atmósfera 9 621 000 toneladas de dióxido de carbono.