CAMAGÜEY.-En la zona en cuarentena, donde se entra y se sale excepcionalmente y nadie puede desandar fuera de su vivienda… ¿quién lleva lo imprescindible a casa? Cuentan las personas encargadas de la mensajería entre los protagonistas de estos días en las 16 manzanas del consejo popular Buenos Aires-Bellavista, aisladas por el riesgo de transmisión allí de la COVID-19.
Se trata de la gente del propio barrio: un grupo a solicitud, otro por voluntad propia, que pasan el día de aquí para allá recogiendo en los puntos para la distribución cuanto llega y entregándolo casa por casa.
Esta misión ha sido otro punto en común entre Mirelkis Luis Cambel y Eira Álvarez Pérez, también subdirectoras en el IPU Máximo Gómez Báez y el hotel Isla de Cuba, respectivamente.
“Antes de comenzar el cierre por la cuarentena nos pidieron nuestra cooperación y sin pensarlo dimos el paso al frente”, repasa Eira y Mirelkis agrega: “Iniciamos temprano en la mañana con el pan y la leche y luego no paramos en todo el día, ya estamos empezando con la distribución de los mandados”.
Cada una se encarga de tres manzana con alrededor de 150 familias cada una, pero no están solas. Según Eira: “La familia nos apoya, en mi caso cuidan de mi niño de seis años, sino esto no fuera posible, y también se nos han sumado vecinos por parte de los Comités de Defensa de la Revolución (CDR) y la Federación de Mujeres Cubanas (FMC). Aun así, nos mantenemos vinculadas hasta tarde participando en las coordinaciones, como son los turnos médicos del próximo día.
“Igualmente hemos tenido el apoyo del Partido, el Gobierno, la Policía, la Zona de Defensa que están aquí todo el tiempo pendientes de lo que hace falta y dan respuesta a los problemas de forma inmediata”, subrayó.
Así, de sus manos, como de otras tantas, llega hasta cada hogar cuanto se consume por estos días en la zona aislada, hasta la comida para animales. Vencidas por el cansancio se van a la cama, pero allí no les sorprende el amanecer. La comunidad les agradece y las autoridades reconocen su esfuerzo: “El apoyo de la población ha sido incondicional, de todo el mundo. Ya no nos alcanzan las credenciales para darles a los mensajeros porque todos los días se nos brindan nuevas personas”, comentó Yorqui Ríos Varela, vicepresidente de la Asamblea del Gobierno Municipal a tiempo completo allí.
