CAMAGÜEY.- Aunque todavía subsisten vulnerabilidades en el control financiero y de los recursos materiales en entidades camagüeyanas, empresas con buenas prácticas en el control interno demuestran que se pueden alcanzar resultados estables, según evidenció un taller acerca de ese tema asesorado por la Contraloría Provincial de Camagüey, con la participación de empresarios, directivos de unidades presupuestadas del Poder Popular y vicepresidentes de los consejos de administración.
El evento económico confrontó los resultados estables de las empresas de Restauración y Conservación y Turismo de Ciudad Santa María, con ejemplos de algunas de las 43 unidades calificadas de deficientes en la última revisión de la Contraloría de la República a 325 auditadas en la provincia. Ambas entidades provinciales, nacieron en la cuna de la Oficina del Historiador de la centenaria ciudad de los tinajones.
Antonio Hernández Roldan, director de la Empresa de Restauración y Conservación, expuso cómo hace 18 años comanda un colectivo estable, con ejecuciones de calidad en la preservación o renovación del patrimonio urbanístico citadino, que ha borrado las pérdidas económicas y los hechos delictivos en ese período, mediante un cotidiano control económico interno que beneficia también a sus trabajadores con el mejoramiento de las condiciones laborales y el alza de los salarios, además de reconocimientos del Partido Comunista de Cuba (PCC), Gobierno y la Central de Trabajadores de Cuba (CTC).
Por su parte, Miguel Leyva Cruz, directivo de la entidad turística Santa María, partió del capital humano atendido, escuchado y con participación en las principales decisiones económicas, cuya estabilidad, capacitación y disciplina laboral a partir del ejemplo de los jefes logró con la aplicación correcta del perfeccionamiento empresarial convertir al colectivo en Vanguardia Nacional, máxime que hace un lustro que están libres de cuenta por pagar o cobrar, bajo la premisa de que lo primero es que el cliente salga satisfecho de sus establecimientos de servicios.
El taller no estuvo exento de malas prácticas económicas que propiciaron o son proclives a la comisión de delitos, corrupción e ilegalidades, como lo sucedido en cinco unidades de la provincia, donde un albañil-pintor (jubilado) que nunca dio la cara en los escenarios de faena, aprovechó el descontrol interno y contrató trabajos de pintura y reparación, las ejecutó a precios exorbitantes con trabajadores “contratados” en flagrante omisión de las resoluciones vigentes, y en menos de tres años, cobró más de 2 millones 863 mil CUP.
Otra ilegalidad presentada por Orlando Cardoso Moreno, especialista auditor de la Contraloría Provincial, se refirió al robo de más de 3 000 litros de combustible en una unidad presupuestada donde los “descontrolados” directivos no advirtieron tampoco que 1 000 litros fueron a parar a manos del chofer de un camión privado.
Miguel Catalá Borges, Contralor jefe provincial, señaló que en el taller las empresas con buenas prácticas en el control interno demostraron que se pueden alcanzar resultados estables, porque “ambas entidades comenzaron con pérdidas y estados financieros críticos, todo lo contrario a la buena salud económica que hoy presentan”.
En una intervención esclarecedora de conceptos prácticos, el diputado Luis Sisto Mora, Vicepresidente para el Órgano de Gobierno Provincial, explicó algunas de las maneras de llevar a los municipios los métodos de eficiencia económica y actuar como demanda la nueva constitución hacia la búsqueda de soluciones financieras que contribuyan al reconocimiento salarial, el bienestar social de los trabajadores estatales, muchos de los cuales migran hacia las modalidades del cuentapropismo.
¿Por qué pagarle miles de pesos a un trabajador privado, si tenemos ese dinero para una inversión, y le negamos esa posibilidad a los estatales de cada lugar con capacidad para ejecutar la tarea, incluso, muchos de ellos hasta son “contratados” por los jefes de brigadas cuentapropistas?, razonó Sisto Mora, con los administrativos camagüeyanos, a quienes instó a vencer los riesgos con más control interno.
Jorge Sutil Sarabia, miembro del Buró Provincial del PCC, al clausurar el Taller sobre buenas prácticas del control interno, subrayó que estos conocimientos deben impregnarse y materializarse en las mentes de los trabajadores en la base donde se produce o se garantizan los servicios y son los núcleos del Partido y las secciones sindicales los abanderados, junto a las administraciones revolucionarias, en evitar que la economía sea mermada por hechos de corrupción e ilegalidades dada la vulnerabilidad del control financiero y de los recursos materiales.
“Tenemos que socializar los planes con los trabajadores, escucharlos y luchar por sus mejoras laborales, sociales y salariales y los administradores deben ser ejemplo de participación en esta batalla, a sabiendas de que cada derrota económica la disfrutan los enemigos del socialismo, los detractores del mejor sistema humanista del mundo, a la caza de nuestra deficiencias que podemos erradicar si logramos en cada colectivo estabilidad y pertenencia”, afirmó el dirigente político.
