CAMAGÜEY.- La comunicación fue el eje transversal de los debates de la Asamblea de Balance de la Unión de Jóvenes Comunistas en la Universidad de Camagüey Ignacio Agramonte Loynaz (UCIAL) rumbo a su 11no Congreso, que este sábado desarrolló su sesión plenaria tras dos días de profundos debates sobre como lograr una organización de vanguardia que a su vez represente a todas y todos menores de 35 años.   

Como se hace común por estos días en Cuba, estudiantes y profesores de la UCIAL condenaron la aplicación extraterritorial del bloqueo y la aplicación total de la Ley Helms-Burton contra un pueblo que su único delito ha sido querer ser dueño de su destino. Un informe contextualizado y apegado a los resultados del trabajo de los más de 100 comités de base que existen en la Universidad y representan el 31 por ciento del universo juvenil, guiaron el debate de los muchachos.

Las intervenciones estuvieron marcadas por la necesidad de utilizar más y mejor las tecnologías en la defensa de la Revolución, la atención a la Federación Estudiantil Universitaria, la identidad nacional, la recreación sana, la ciencia vista de los jóvenes y la necesidad de no olvidar los canales tradicionales de comunicación para que  llegue la información oportuna e inmediata, a cada uno los comités de base.

Daylén Miranda, de la facultad de Economía, abordó la importancia que tiene para una Universidad como esta la vinculación estrecha FEU-UJC, “al final somos los mismos y nadie se puede quitar un traje de una organización para ponerse el de la otra”, enfatizó. Felipe Bencomo, uno de los secretarios del Comité UJC de esta Casa de Altos Estudios, hizo hincapié en la necesidad de ser más creativos con la divulgación de la Historia de Cuba, llamó a buscar las emociones de cada hecho, tendiendo en cuenta que esta generación es muy audiovisual.

“Hay que tomar las redes y generar contenidos”, explicó la estudiante de derecho Doraine Linares, quien además se refirió a la necesidad de no descuidar que la UJC es una organización de vanguardia y así deben ser los jóvenes que la integren. Consciente de los tiempos que corren en los que las guerras también hay que ganarlas en el escenario infocomunicacional, Deneb González propuso el acuerdo de capacitar a los muchachos para ser más efectivos con los mensajes en las redes “y eso es responsabilidad de esta vanguardia política juvenil”. Por su parte Rachel Barrero se preocupó por la comunicación desde los carteles, las imágenes, los murales. “La comunicación boca a boca es esencial para una organización que necesita convencer y ser creíble”, dijo. 

Roberto Conde Silverio, miembro del Muró Nacional de Juventud y jefe de su departamento de organización, aclaró que para que exista UJC tiene que haber militantes y para que existan militantes hay que crecer. “Debemos romper el mito de que en las universidades no se realizan crecimientos”. El Comité de Base es la mejor red social que tiene la juventud, explicó el dirigente juvenil, “necesitamos organizaciones de base que funcionen de verdad”.

“¿Qué los limita a hacer todo lo que ustedes se han propuesto?”, preguntó Jorge Luis Tapia Fonseca, miembro del Comité Central del Partido Comunista de Cuba (PCC) y primer secretario en Camagüey. Nada respondieron coro los asistentes al cónclave juvenil, “entonces hay que trabajar más, ser más propositivos y esperar menos indicaciones, el Partido necesita de una juventud fortalecida que estudie, porque ya llegó su hora, muchos jóvenes como ustedes asumen hoy responsabilidades a todos los niveles, Cuba necesita de ustedes” reafirmó, a la vez los convidó a pensar cómo hacer un verano más cercano a lo que esperan los jóvenes camagüeyanos.

La UCIAL tiene 4049 jóvenes, 3575 estudiantes y 474 trabajadores, de ellos 1265 militan en las 105 organizaciones de base de la Unión Jóvenes Comunistas. Trabajar para ellos, sean militantes o no, fue la principal misión que le dejó esta asamblea a la recién electa dirección de la organización en la universidad camagüeyana.