CAMAGÜEY.- Aunque el pasado año el efecto económico de las innovaciones realizadas en Camagüey excedió los dos millones de pesos y el aporte del 2 % por ese concepto sobrepasaba los 200 000, la segunda Conferencia Provincial de la Asociación de Innovadores y Racionalizadores (ANIR) en Camagüey no fue de celebraciones, se centró en los problemas que impiden resultados superiores.

Alfredo Machado López, presidente nacional de la ANIR, señaló que a la organización “en estos tiempos tan complejos, le urge ser más ‘agresiva’, y allí donde los trabajadores no tengan motivación buscar opciones, porque aun cuando se proponen elementos para aumentar la cuantía de remuneración normada, eso no lo es todo”.

En la cita, de 148 delegados, se dialogó sobre el funcionamiento, la calidad de las asambleas de asociados, así como las dificultades para presentar trabajos cuando, en ocasiones, no resultan de interés de la institución.

“Hay que demostrarles a las administraciones que resolvemos problemas y que gracias a nuestro actuar se cumplen los planes”, apuntó Ileana Aragón Rosabal, de la Empresa Agroindustrial de Granos Ruta Invasora.

Ricardo Sis Sánchez, anirista de la construcción, señaló que “la sección sindical también debe ganar en agilidad y responder con la misma premura con la que un trabajador repara piezas o revierte roturas de maquinarias”.

Se propuso otorgarles a los inspectores la posibilidad de imponer multas en donde se incumple lo establecido, y valorar la inclusión del trabajo de la organización dentro de las auditorías.

Foto: Orlando Durán Hernández/AdelanteFoto: Orlando Durán Hernández/Adelante

El nuevo Buró Provincial en su primera reunión ratificó a Remberto Santana Perdomo como presidente provincial, y fueron presentados los delegados a la cita nacional.

En las palabras de clausura, el miembro del Buró Provincial del Partido Walter Simón Noris, señaló que lo más importante de cada organización es identificar los problemas, las causas y las posibles soluciones, más en estos tiempos “en los que tanta falta hace el empleo de las reservas, de ser más organizados y vincularnos más. La ANIR no puede perder la esencia por la que fue creada; el reto radica en funcionar de verdad, en crecer y revolucionar como organización”.