CAMAGÜEY.- La creación de mejores condiciones para los pasajeros, ante la próxima entrada en servicios de un nuevo tren en la ruta La Habana-Holguín, son tareas de prioridad que acometen en la terminal ferroviaria de esta urbe.

Con cuatro salones de espera, servicios gastronómicos y baños, entre otros beneficios, tras la reparación general realizada en el 2017, ahora se busca garantizar una favorable estancia de los viajeros, tanto los camagüeyanos como de los que vienen de otras provincias.

Cada sala tiene capacidad para 80 personas sentadas, en asientos confortables, y se proyecta facilitar el servicio de agua potable en ellos, los cuales hoy están ubicados en tres cajas en el andén.

Eduardo Guerra Vázquez, director adjunto para Camagüey de la Empresa de Ferrocarriles Centro-Este, explicó que en estos momentos, como se ha orientado por el Ministerio del Transporte, concentran las principales labores en dejar lista la instalación para cuando entren en explotación los coches de procedencia china, que arribarán próximamente al país.

Agregó que se habilitará un local para facilitar a los pasajeros durante su permanencia en la terminal, que puedan guardar sus equipajes con seguridad, e incluso, recorrer zonas atractivas de la ciudad cercanas al lugar como el Museo Parque Temático del Ferrocarril, mientras esperan la salida de su tren.

También evalúan, comentó, los posibles flujos de personas con el objetivo de saber dónde ubicar a los pasajeros de espera, los de último momento, y los de los trenes locales, pues hay que tener en cuenta la confluencia de estos con los nacionales.

Como es tradición en esta urbe centro-oriental, ubicada a unos 500 kilómetros de la capital, se realiza el proceso de revisión de las locomotoras, para lo cual se dispone del personal calificado y las condiciones necesarias a fin de solucionar desperfectos técnicos y otras situaciones que garanticen continuar la marcha.

El confort también distingue a los de segunda clase, que cuentan con ventiladores y asientos reclinables y giratorios.El confort también distingue a los de segunda clase, que cuentan con ventiladores y asientos reclinables y giratorios.

Guerra Vázquez dio a conocer que se emprenderán acciones de divulgación sobre el cuidado de estos coches de transporte por parte de los pasajeros, las limitaciones de los equipajes a trasladar, entre los que se encuentra la medida de los bultos, los cuales deberán tener un tamaño adecuado.

Por otro lado, subrayó, los equipajes pueden contener hasta 30 kilogramos de peso, aparte de cinco considerados como carteras o portafolio u otros que trae la persona consigo, requerimientos que se evaluarán severamente, y de no ser así, no se autorizará a viajar a quienes incumplan esos requisitos.

Según argumentó Guerra Vázquez, las características de los nuevos coches no le permitirán prestar servicio de expreso, como lo hacen otros trenes nacionales, de ahí la importancia de cumplir las disposiciones relacionadas con el pesaje de los equipos.

Otra de las medidas será la venta de los asientos, de manera que cada pasajero se responsabilice con su cuidado y responda al final del viaje por su estado, precisó el director adjunto.

Toda medida que se adopte buscará proteger esos recursos tan costosos para el país, y de elevado confort, de primera y segunda clase, los cuales permitirán ofrecer servicios de calidad, y menor tiempo de recorrido.