CAMAGÜEY.- El Instituto de Investigaciones y Desarrollo Agrícola, entidad perteneciente al Ministerio de la Agricultura, validó para todo el país el uso de mangueras flexibles para el riego de agua en campos típicos de arroz de un kilómetro de longitud, en sustitución del canal terciario.

Durante los años 2016, 2017 y 2018, el Centro Integrado de Tecnología del Agua (Cita) ejecutó un proyecto de ciencia e innovación, con cierre final del programa en diciembre, dedicado a poner en práctica la experiencia llevada a baja escala en tierra del campesino del municipio Esmeralda, Pluvio de Armas, en el período 2010-2011.

Posteriormente los ensayos se trasladaron a la Unidades Básicas de Producción Cooperativa (UBPC) Daniel Readigo y Armando Diéguez Pupo, enclavadas ambas en la empresa arrocera Ruta Invasora de Vertientes, con un rango de eficiencia del 85%, explicó el subdirector del CITA, ingeniero Raidel Vidal González.

De lograrse una topografía nivelada, como sucedió en los suelos del pequeño agricultor esmeraldense, la efectividad en el riego del medio sur camagüeyano podía llegar al 98,8%, con un ahorro de 2 200 metros cúbicos de agua por hectárea y un incremento de 1,25 toneladas de arroz en igual superficie.

En la empresa arrocera Sur del Gibaro , de Sancti Spíritus, existe la intención de aplicar esta novedad científica y también, de cara al futuro, en el plan arrocero de la provincia Granma.

Como parte de todo el proceso para el uso racional de agua, en estas dos entidades se ha trabajo rigurosamente en la calibración de obras hidráulicas y en fabricar reglas o miras esenciales para completar el trabajo sobre el consumo del preciado líquido en este sector, el de más alto régimen de gasto de todos los grupos empresariales del Ministerio de la Agricultura.

El auge tomado por la calibración conllevó a ampliar el equipo de trabajo, destacó la fuente, la que relacionó en esta tarea técnica a Tomás Fernández, Raúl Inclán, Carlos Oscar Martínez, Roilandi Cantillo, Raudel Fernández y Osleidis Torres.

El MS.c Héctor Moreno Guerra lideró este proyecto, integrado, además de Raidel Vidal, por Eduardo Fernández Chinea y Jorge Aguilar Pérez, todos asociados al CITA, perteneciente al Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos.

Todo cuando se haga para ahorrar agua redundará en la economía del país y en elevar los niveles de producción de arroz como parte de la estrategia para reducir la importación del grano.