CAMAGÜEY.- La Universidad de Camagüey Ignacio Agramonte Loynaz tiene dentro de sus prioridades para este curso escolar el desarrollo de estudios científicos de alto impacto a través de la colaboración con varios países. Las investigaciones responden a la necesidad de continuar el perfeccionamiento y avance de la política científica en la universidad cubana.

A la ampliación de programas de doctorados y maestrías, las publicaciones en revistas especializadas de ciencia y los convenios con centros de altos estudios de otras latitudes, se le suma la aprobación del Mariposario, un proyecto que desarrollan en conjunto con el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo y que tendrá su espacio en el Jardín Botánico de la ciudad.

De acuerdo con Pablo Galindo Llanes, vicerrector de Investigaciones y Postgrados en el centro, la ejecución de la obra será posible también gracias a las relaciones de trabajo entre la universidad y las autoridades del gobierno y el partido en la provincia.

El nuevo calendario docente estará marcado además por la continuidad del curso de preparación y superación de los cuadros del sector empresarial, en todas las cuestiones referidas a la legislación. “Una tarea de gran importancia que ya cuenta con resultados positivos y que esperamos se mejoren en la etapa”, comentó Galindo Llanes.

La primera universidad fundada en Cuba luego del triunfo de la Revolución ha concretado aproximadamente 130 convenios con otras naciones y ha egresado más de 74 mil profesionales, de ellos mil 500 extranjeros de 77 nacionalidades. El reto para el 2019 es continuar con el proceso de perfeccionamiento y desarrollar las relaciones de la universidad camagüeyana más allá de los límites del territorio nacional.