CAMAGÜEY.- Con 28 años de fundado, el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB) de esta provincia, sobresale como la entidad para el desarrollo y la fabricación de productos agropecuarios dentro del sistema de la biotecnología en Cuba.
Las vacunas Gavac contra la garrapata del ganado bovino, y Porvac contra el cólera porcino, y el bionematicida Hebernem para el control de nematodos en las casas de cultivo protegido, son los fármacos que actualmente se comercializan en Cuba bajo la marca de esa institución científica.
Yamilka Ramírez Núñez, especialista principal del Grupo Comercial del CIGB en el territorio,explica que de Gavac, producto estrella del centro, se han facturado un millón y medio de dosis hasta este mes de julio, poco más de la mitad del plan del año.
El alcance de Gavac a nivel nacional fue de 900 mil cabezas de ganado hasta finales de 2017, certificadas por el Departamento de Salud Animal del Ministerio de la Agricultura, cifra que debe incrementarse al concluir el primer semestre de este año, gracias a la primera campaña de vacunación del calendario.
En el caso de Porvac, vacuna de reciente registro en el cuadro básico de medicamentos veterinarios del país, ya se aplica en nueve provincias y se han liberado casi 760 mil dosis, destinadas fundamentalmente a las unidades multiplicadoras y genéticas de la industria porcina nacional.
Añadió Yamilka Ramírez que de Hebernem se han comercializado casi mil 500 unidades o bolsas, para las casas de cultivo de toda Cuba, aunque también están realizando estudios introductorios del bioproducto en plantaciones a cielo abierto.
Nemesio González Fernández, jefe del Departamento de Investigación y Desarrollo del CIGB en Camagüey, explicó que la entidad, como parte del sistema de biotecnología en Cuba, rectorado por el CIGB de La Habana, es la encargada de desarrollar la tecnología y producir las formulaciones para uso agrícola y veterinario.
4El CIGB en Camagüey cuenta con tres plantas, una para la fermentación de bacterias y levaduras, para la purificación y para la formulación de vacunas, donde los tres productos intervienen en alguna fase de su obtención, otra planta para el cultivo de células de mamíferos para Porvac, y otra para la formulación de bioproductos como Hebernem.
Acotó González que en Camagüey se asume el desarrollo de tecnologías y la producción de resultados de proyectos que investigan en el CIGB de La Habana y en el propio territorio, en estos momentos enfocados fundamentalmente en la pesquisa de bioproductos para cubrir una amplia gama de enfermedades agrícolas.
Inaugurado el 25 de julio de 1989, cuando el Comandante en Jefe Fidel Castro, líder de la Revolución Cubana, visitó las instalaciones recién construidas, el CIGB de Camagüey mantiene como premisa crear componentes biotecnológicos de alto valor agregado en ciclo cerrado, para la exportación y la sustitución de importaciones
