MINAS, CAMAGÜEY.- La última jornada de estancia de la brigada internacional de solidaridad Primero de Mayo y del contingente Che Guevara de Canadá en esta provincia estuvo matizada por la lluvia.

Hasta el norteño municipio de Minas, en el estadio de pelota 9 de abril en el reparto Nueva vida los vecinos recibieron a los visitantes. Para el convite lo mejor del arte y el deporte de la zona, incluido los pequeños del Centro de Promoción para la Danza Fernando Alonso y el grupo de raíces haitianas Bonito Patúa.

En medio de interesantes representaciones músico-danzarías, de ejercicios aeróbicos, de los abuelos, de los pequeños de la educación pre-escolar, así como de un juego de pelota entre futuros campeones y de juegos tradicionales llegó la lluvia para intentar impedir la fiesta solidaria.

Bajo una fina llovizna comenzaron los acordes de Cuba isla bella, y para cuando se cantaba Cuba qué linda es Cuba ya el torrencial aguacero había levantado de sus asientos en las gradas a los caravanistas que aplaudían y coreaban “Viva Cuba, abajo el bloqueo”.

Las actividades de la mañana terminaron en la Cooperativa de Créditos y Servicios Primero de Mayo del territorio donde intercambiaron con algunos de sus trabajadores y degustaron frutas tropicales.

Erick Fernández, un campesino panameño, dijo estar gratamente sorprendido por el trabajo agroecológico en la zona, por el respeto a la tierra, y el cuidado de las producciones, única vía posible para llegar a la soberanía agrícola.

Por su parte Aaron Ruby norteamericano, traductor de profesión, dijo que Cuba había cambiado mucho desde su última visita a Cuba en los años ’90, que “se siente el fervor revolucionario, el trabajo, la dedicación y el empeño por el desarrollo de la población. Regreso con muchas notas, fotos para contar la verdad sobre Cuba, allá nos dicen muchas mentiras sobre la realidad de este hermoso país”.

Con un encuentro con las principales autoridades políticas y gubernamentales en el territorio culmina la visita de la brigada Primero de Mayo y del contingente Che Guevara, a Camagüey. Tres días de intercambios en centros científicos, de salud, de interés económico e histórico marcaron la ruta de quienes hacen de la solidaridad un camino a la integración de los pueblos.