CAMAGÜEY.- (ACN) El tornado que ocurrió hace dos días en esta ciudad, y afectó algunas viviendas e instalaciones de un pequeño sector del centro histórico, es un fenómeno atípico y aislado, fue muy breve y no fue registrado en los datos de los radares meteorológicos.

Así lo explicó a la ACN Orlando Rodríguez González, jefe del Departamento Nacional de Radares ubicado en el Centro de Meteorología de la provincia de Camagüey, quien consideró poco probable la repetición de un evento de ese tipo, pues se manifestó sin existir todas las condiciones que lo propician.

Señaló el especialista que la nube de la cual se originó no tenía características de tornado o de tormenta local severa, y la duración de la circulación del evento fue tan efímera que no llegaron a registrarse datos sobre su ocurrencia en el radar de Camagüey.

Con él coincidió Yosdanis Estrada, jefe del Departamento de Pronósticos de la citada institución, quien añadió que el tornado alcanzó una velocidad entre 110 y 120 kilómetros por hora, según la escala de Beaufort, instrumento utilizado para la estimación de la velocidad del viento según los daños provocados.

 Por esa estimación empírica, ya que no hubo registro mediante ningún instrumento, se consideró que el evento pudiera clasificarse como un F 0(cero) según la escala de Fujita-Pearson, la cual mide la intensidad de los tornados desde cero hasta cinco, acotó Estrada.

La convergencia de las brisas, la débil influencia anticiclónica y el fuerte calentamiento del día, además de una línea de precipitaciones, fueron los factores que se manifestaron, con un carácter extremadamente local e inusual, en el centro de la urbe, precisó el jefe del Departamento de Pronósticos.

Para que se forme un tornado, deben colisionar una masa de aire frío y otra de aire caliente con una alta velocidad de rotación del viento.

A pesar de su atipicidad y de su clasificación como fenómeno leve, sus daños se manifestaron en las pérdidas totales y parciales de techos en 24 viviendas, y de tres instituciones estatales, entre ellas el Teatro Guiñol de Camagüey, que perdió toda la cubierta de zinc de la segunda planta.

La Defensa Civil y las autoridades del territorio confirmaron que no hubo lesionados ni pérdidas humanas, y que se trabaja en la recuperación de las edificaciones dañadas.