CAMAGÜEY.- Durante los primeros días de enero de 1959 se produjo un hecho poco divulgado, que pasará a la historia como el enlace de todas las emisoras camagüeyanas de entonces en la Cadena de la Libertad, con su planta matriz en Cadena Agramonte, en Avellaneda 215, la que se encargó de mantener informado al pueblo sobre los últimos acontecimientos de la triunfante Revolución.

Tuvo una vida efímera. Desempeñó una función importante durante el llamado que hiciera Fidel en Santiago de Cuba de ir a la huelga y para emitir partes, elaborado por el Movimiento 26 de Julio, organización de vanguardia de la lucha que designó como locutor titular en la emisora a José Luis Cadenas Arango y como operador de audio a Jaime Velazco Pimentel.

Mediante documento oficial, emitido por el 26, ambos fueron los únicos autorizados a permanecer en la emisora con ese propósito. Al esfuerzo informativo se unieron Radio Jatibonico, Radio Surco,, Radio Morón, CMJK, La Voz del Camagüeyano, CMJC, Cadena Camagüeyana de Radio, Radio Legendario, CMJW, de Morán Arteaga, en la Avenida de la Libertad y CMJA, de Valdés Jiménez, en los altos de la actual pizzería La Piazza, en la plaza de El Gallo.

José Luis Cadenas recuerda que en esos días el acceso a los estudios estuvo limitado a combatientes del Ejército Rebelde y a autoridades del 26 de Julio, como Homero Guasch, con una fuerza de custodia a la entrada de la emisora.

Cuando Fidel arriba a Camagüey el 4 de enero, en la Caravana de la Victoria que lo llevaría hacia la capital, donde llegó el 8 de enero, la Cadena de la Libertad había cesado al igual que la huelga general.

Desde siempre la Revolución atribuyó gran importancia a los medios de comunicación y a la radio, en primer lugar, cuando fundó Radio Rebelde el 24 de febrero de 1958 en Altos de Conrado, intrincado paraje de la Sierra Maestra, en la provincia Granma, con la dirección general de su fundador el Comandante Ernesto Che Guevara.