CARLOS MANUEL DE CÉSPEDES, CAMAGÜEY- Con la solemnidad luctuosa que impone el momento, los habitantes de este municipio, el más occidental de la provincia camagüeyana rinden homenaje a Fidel, el inconmensurable gigante de este siglo.

La casa de la cultura, ubicada en la calle Paseo, se transformó en las últimas horas en un hervidero de hombres, mujeres, jóvenes y niños que ataviados con flores llegaban frente a la fotografía, que reproduce a este hombre de estatura universal, y con rostros de recogimiento y respeto.

Aracelys Rivas Duarte, máxima dirigente política en la demarcación, declaró a la prensa que en menos de dos horas de iniciada la ceremonia pasaron por el lugar más de dos mil personas, encabezadas por trabajadores de la salud, educadores, estudiantes y representantes del sector deportivo.

En el recinto ofrendas florales del Partido Comunista de Cuba y del pueblo acompañan la imagen de Fidel, vestido con su traje verde olivo de campaña en el corazón de la Sierra Maestra.

La guardia de honor ha estado guiada por el coronel de la reserva Luis Enrique González Piloto, quien ingresó a las Fuerzas Armadas Revolucionarias, desde las filas de las Milicias Nacionales Revolucionarias que combatió las bandas de alzados contrarrevolucionarios en el Escambray.

Él tuvo el privilegio de conocer a Fidel y de reservar en su corazón, con latidos de 78 años, un espacio para no olvidar, como mismo lo hacen miles de cespedeños en los 44 centros habilitados en el municipio para firmar el juramento en cumplimiento del concepto de Revolución que hizo público el primero de mayo del 2000.