CAMAGÜEY.- Comenzó el San Juan y como cada año todos tienen su espacio en él. Los ensayos para el carnaval infantil llamaron la atención de los más osados, algunos arrollaban por primera vez en las calles camagüeyanas mientras otros seguían la tradición en defensa de la rumba cubana.

Angeli Díaz Savedra es una niña de once años que pertenece a la casa de la cultura Julio Antonio Mella y tras su participación en el proyecto Cubaila llamó la atención de la jefa de ciclo de su escuela, Conrado Benítez García, quien la integró en la comparsa Los Luceritos. Este año fue su primera presentación y es inevitable al mirarla ver la emoción que representa para ella bailar afirmando sentirse ¨más que contenta¨.

Entre los más chicos de la comparsa resalta Samary Pérez León, pequeña que comenzó a bailar con solo tres años y desde entonces participa en cada festejo. Ya tiene ocho años de edad y dice sentirse año tras año “más alegre y contenta de poder participar, porque desde pequeña le dije a mi mamá que me gustaba bailar y me llevó a la audición para poder participar en la comparsa”.

La conga Los Comanditos también lució con aires carnavalescos a los más pequeños de casa como es el caso de Jorge Agustín Hernández Varona o “Jorgito” como lo llaman todos, solo tiene cinco años y por segunda vez llegó hasta la Avenida para portar con orgullo al ritmo de los tambores su bandera identificativa, afirmando además que su pasión es tocar y bailar.

Los infantes defendieron en su carnaval nuestras ricas tradiciones, con la inocencia y ternura típica de la edad, no queda duda que el relevo está garantizado. ¡En Camagüey habrá San Juan para rato!