CAMAGÜEY.- Camagüey es una de las 15 provincias que establece la división político-administrativa del archipiélago cubano, que incluye, además de sus cayos adyacentes, la Isla de la Juventud, separada del territorio nacional.
Fundada en 1514 por los conquistadores españoles cumple el 2 de febrero del 2019 su aniversario 505, ocasión en que sus lugareños se han fijado una serie de realizaciones económicas y sociales; dentro de ellas la celebración de la Semana de la Cultura a partir del 1ro. y hasta el 7, para homenajear dicho cumpleaños.
A la provincia, enclavada originalmente en la bahía de la costa norte, se le bautizó por los “descubridores” como Santa María del Puerto del Príncipe, pero debió ser trasladada, para evitar ataques de piratas y corsarios, que eran frecuentes, hacia el interior del territorio en 1528, para un cacicazgo aborigen que se nombraba Camagüebex o Camagüebax, de los cuales se deriva, según se afirma por historiadores, el topónimo de Camagüey.
Con una rica historia patriótica de luchas, primero contra el colonialismo español, a la cual aportó, en fecha tan temprana como 1851 los primeros mártires en la persona de Joaquín de Agüero y sus compañeros, y en las contiendas independentistas de 1868 y 1895, y después durante la insurrección liderada por Fidel Castro contra la dictadura proimperialista de Fulgencio Batista, los naturales de la provincia se sienten orgullosos de las epopeyas que han protagonizado.
Pero es a partir del triunfo revolucionario de 1959, como ocurrió en toda Cuba, cuando realmente Camagüey logra poner en marcha sus potencialidades desde el punto de vista productivo y social, tomando como bandera el desarrollo educacional y la atención a la salud de sus pobladores, conquistas totalmente gratuitas reconocidas y respetadas universalmente.
Baste decir que de una modesta sala de emergencias que existía antes de la Revolución en la ciudad cabecera, hoy prestan sus servicios cuatro modernos hospitales de todas las disciplinas, cientos de consultorios del médico de la familia para la atención primaria y un policlínico en cada uno de sus 13 municipios, todo lo que le permite presentar un indicador de 2.4 de mortalidad infantil por cada 1 000 niños nacidos vivos, el más bajo de la región y de muchos países desarrollados, incluido los Estados Unidos, y un promedio de vida de 78 años, cuando antes del triunfo revolucionario este era de 58.
En cuanto a la educación solo citaré como ejemplo que si antes de 1959 prácticamente no se contaba con la enseñanza universitaria en el territorio, hoy son cuatro las casas de altos estudios, dentro de ellas la primera fundada por la Revolución.
Cabe a Camagüey el orgullo, en el orden cultural, que fue aquí, en 1608, donde el canario Silvestre de Balboa escribió la primera obra literaria que se conoció en Cuba; que hoy funcionan escuelas e institutos de arte en variadas manifestaciones e instrumentos, y que aquí nació y creció la segunda compañía de ballet de la nación.
El centro de la ciudad, con sus calles laberínticas y adoquinadas, sus leyendas y sus señoriales iglesias católicas, monumentos de la etapa colonial, fue declarado en el 2008 Patrimonio Cultural de la Humanidad, en atención a la conservación de su patrimonio tangible y no, donde se entrelazan en armonía lo moderno y lo histórico.
Hace una década desde que parte del centro histórico de #Camagüey fue reconocida por la @UNESCO como Patrimonio Cultural de la Humanidadhttps://t.co/Kphe2ch0ky pic.twitter.com/486w6lVz0f
— Periódico Adelante (@AdelanteCuba) 10 de julio de 2018
Tiene nuestra ciudad uno de los tres centros de Ingeniería Genética y Biotecnología del país con notables realizaciones en el orden científico; mientras, en el deporte, posee numerosas instalaciones para su ejercicio y desarrollo que incorpora desde las primeras enseñazas la práctica de la educación física para la formación no solo de sus campeones, sino también como parte de la integralidad saludable de sus pobladores.
Eminentemente agropecuaria, la provincia centroriental es una de las mayores en extensión territorial con alrededor de unos 13 000 kilómetros cuadrados, con más de 750 000 habitantes, y en sus extensas llanuras la ganadería bovina constituye una de sus principales riquezas, aunque no se desestima la producción azucarera.
Fundada en el 1514 como Santa María del Puerto del Príncipe, en el transcurso del desarrollo colonial y el surgimiento del pensamiento renovador de los criollos, se perdió lo del santoral y solo quedó Puerto del Príncipe, topónimo que en abril de 1903, después de fundada la República el 20 de mayo de 1902, por resolución de los Consejos Provincial y Municipal del gobierno de aquella época, se oficializó el nombre aborigen de Camagüey, que identifica la provincia y la ciudad capital, nombre del cual se deriva el gentilicio de camagüeyanos, que llevan con orgullo sus pobladores.
Tal orgullo obedece a la historia que escribieron antes, y en parte por ser la cuna de las Constituciones de la República en Armas contra la dominación española, y de la que son protagonistas de una Revolución que comenzó con las luchas independentistas contra la dominación colonial y continúa hoy contra las pretensiones hegemónicas del imperialismo norteamericano.