CAMAGÜEY.- El estado de gracia en el cual fluye la vida orgánica de la Asociación Hermanos Saíz (AHS) aquí levantó ciertos temores: ¿sobre qué discutir en su asamblea provincial 3er. Congreso si todos los reclamos parecen estar satisfechos?

¡Pues en el Teatro Avellaneda hubo debate! Tras un originalísimo informe presentado como audiovisual, los asociados desfilaron frente a los micrófonos, algunos para agradecer a su Asociación; otros, para esbozar preocupaciones.

La escritora Evelyn Queipo se refirió a su gremio como “los protagonistas desplazados” debido a las diferencias sustanciales en el sistema de pago por derecho de autor que reciben los escritores, con respecto a otros artistas.

Otros asuntos analizados fueron la presencia de la tema religioso en el arte, el ego, la necesidad de concederle más protagonismo a la AHS, la deficiente convocatoria al sistema de becas y premios de la organización y la carencia de recursos en la enseñanza artística. También se debatió acerca del tatuaje como fenómeno artístico en condiciones de legalidad, la defensa del periodista cultural, la urgencia por cultivar no ya un gusto estético entre los públicos, sino una conciencia.

En el encuentro se destacó al proyecto sociocultural Golpe a Golpe. Se demandó un estudio de representaciones sociales, que indique cómo nos perciben, y a partir de ahí trazar las estrategias comunicacionales y elegir los proyectos que auspiciará y promoverá la Asociación.

De igual forma los miembros de la AHS surgieron propuestas como la creación de un banco de memoria de la organización y de un cine club que agrupe las secciones para dar vida a proyectos audiovisuales que pueden materializarse con relativa facilidad en Camagüey, gracias a la productora Luz Joven.

Como colofón se eligió a Ihordan Torres nuevo presidente de la filial. También seleccionaron los delegados al 3er. Congreso y despidieron a Yunielkis Naranjo, tras 20 años en la dirección de la AHS, aunque como director de Golpe a Golpe, no se desprenderá tan fácil de su Casa del Joven Creador.

La asamblea provincial camagüeyana, a la que asistieron las máximas autoridades del Partido Comunista de Cuba, el Gobierno y la Cultura en el territorio, se desarrolló de la misma forma en la que transcurre la cotidianidad de la institución: con más aplausos que reclamos, con más luces que sombras.