CAMAGÜEY.- Con una expresión así, no hay lugar al adiós definitivo. La certeza de vernos pronto es otro de los regalos del 8vo Festival Internacional de Videoarte de Camagüey (FIVAC), que anoche con la gratitud por tantos días de aprendizaje, en plena clausura dio paso a un nuevo sueño: los preparativos de la próxima edición.

“Declaro abierta la convocatoria del 9no”, dijo el artista multimedial Jorge Luis Santana Pérez, presidente del festival, quien agradeció de manera especial a los artistas por acompañar con su obra y su talento, al equipo de voluntarios y a la dirección provincial de Cultura.

El cierre en la sala Georges Méliès incluyó el primer concierto en la provincia de Magui Blue Band, de la cantante camagüeyana radicada en La Habana, Margarita Morales (Magui Blue), recientemente premiada en el Festival Cuerda Viva como la joven figura femenina del año en Cuba.

Durante poco más de una hora presentó las claves de su proyecto, para pintar con otros tonos su carrera marcada durante seis años por “la locura expresiva” de Qva Libre, aunque también la suya es una “locura” rítmica con acentos de pop rock a temas del cancionero romántico, e interesantes versiones a boleros tremendos como Quiéreme mucho, Obsesión y Lágrimas negras, entre otros.

Mientras vivió aquí, Margarita fue público entusiasta del festival. El 8vo FIVAC no pudo seguirlo como antes, mas tocó en su verdadero epicentro, El Circuito, supo del esmero en la organización, y hasta intuyó la vocación terapéutica, útil para tanto creador angustiado por la problemática del hombre contemporáneo.

Contrario a lo que dice Sabina, al lugar donde hemos sido felices sí debemos volver. La invitación salió de casa, con la sinceridad en la voz de Santana: “Nos vemos en el 2021”.