CAMAGÜEY.- La periodoncia es la ciencia que se ocupa del estudio de los tejidos encargados de soportar y proteger el diente —la encía, hueso alveolar, ligamento periodontal y el cemento radicular— y, por supuesto, ejerce un papel importante en la prevención, diagnóstico y tratamiento de las enfermedades y escenarios que los afectan.

Para consultar acerca del tema tuve la posibilidad de contar con el auxilio de la Dra. Ana Vara Delgado, especialista de 2do. Grado en Periodoncia, Máster en Bioenergética y Medicina Tradicional y Profesora Consultante, de la Facultad de Estomatología de la Universidad de Ciencias Médicas Carlos J. Finlay, de esta ciudad, quien definió al inicio de qué trata su especialidad, que ejerce en la clínica docente doctor Ismael Clark y Mascaró.

¿Cuáles son las afecciones que atañen a la periodoncia?

—Las de mayor prevalencia en el mundo, en nuestro país y en Camagüey, son la gingivitis y periodontitis.

De esas, ¿alguna sobrepasa a la otra por número de casos?

—La gingivitis crónica.

¿Cómo se comporta?

—Cuando la encía sangra, incluso ante el cepillado, y se inflama; por regla general no duele y ese es un problema. Aclaro, tenemos dos tipos de gingivitis: la edematosa y la fibrosa, ambas crónicas, pero la primera mencionada va acompañada de sangramiento y la segunda transcurre silente, o sea, está allí; sin embargo, el paciente no sabe que la padece, y sigue avanzando hasta inducir un desgaste irreversible en el hueso.

¿Por qué la falta de dolor constituye un problema?

—Las personas acuden a nuestros servicios cuando tienen un dolor, por eso frente a las caries, que sí duelen, buscan ayuda del estomatólogo con rapidez.

Al decirme que es crónica, ¿no cura?

—Llega a curar sin dejar secuela si el diagnóstico y tratamiento son oportunos mediante una u otra maniobra que la controle.

¿Qué la produce?

—Un cepillado deficiente, por descuido, tanto en su frecuencia como en la forma y el tiempo de hacerlo. Otras dolencias influyen, pero necesitaríamos un capítulo aparte porque entran también el estrés y la ansiedad, entre otros factores.

“Si realizamos cepillados horizontales, en menos de cinco minutos, y pocas veces en el día podemos padecer una gingivitis crónica, y si no se trata o se trata mal, no la detectamos a tiempo, consigue llegar a la periodontitis (cuando pasa de los tejidos de protección; de la encía al hueso, al ligamento y los dientes responden con movilidad, con retracción de la encía, vemos los dientes más grandes de lo normal)”.

¿Cuál sería el final de la periodontitis?

—Si la persona pasa de los 50 años, presenta movilidad de sus piezas dentarias, migración de los dientes, salidas de estos de su lugar, es posible que llegue a perder la dentadura.

Volvemos a la gingivitis, ¿a qué edad aparece con mayor asiduidad?

—En los niños y adolescentes. Desde que brotan los dientes permanentes surge de manera leve porque el chico no cepilla correctamente su dentadura y avanza si ingiere alimentos con actuar desordenado, caramelos, galleticas, carbohidratos.

“Algunos menores lavan sus dientes una sola vez al día y no lo hacen antes de acostarse, y eso es fatal”.

Dentro de esos dos grupos etarios, ¿cuál es el más complicado?

—La adolescencia, resulta un estado funcional normal con recambio hormonal.

¿Con qué frecuencia al día debe ser cepillada la dentadura?

—Cuatro veces y durante cinco minutos cada una.

De esas cuatro, ¿algunas son más importantes que otras?

—Sí, después del desayuno y antes de acostarse. Nunca conviene que el niño en la mañana vaya al círculo infantil o a la escuela sin cepillarse después de desayunar, y tampoco aquellos pequeñitos que quedan en casa, debe ser una práctica obligada y no ir a la cama sin lavarse su dentadura.

“Consultamos a muchos niños que limpian sus dientes al levantarse, no después del desayuno, van a sus labores con los dientes sucios y ahí las bacterias empiezan a trabajar y lo hacen todo el día, porque lo repiten de noche, si acaso después de la comida, y ese alimento va quedando y constituye el sustrato acumulativo de las bacterias.

“Esas bacterias surgen de la misma boca y se “organizan” en algo denominado placa dentobacteriana, la precursora de las caries y de las periodontopatías”.

¿Qué ocurriría entonces?

—Comienza por una gingivitis leve, moderada, y luego más complicada al transcurrir el tiempo y da lugar a la periodontitis.

¿Qué otro grupo poblacional requiere de atención muy oportuna?

—Las embarazadas. En ellas ocurre algo similar que en los adolescentes, sufren de un recambio hormonal.

¿Es cierto que las embarazadas pierden calcio en esa etapa de la vida?

—No, ese concepto está errado. Se les ofrecen todas las facilidades y prioridades para que acudan al estomatólogo y todo está muy regulado en el Programa de Atención Materno Infantil (PAMI), sí es un hecho el que estas bacterias logran atravesar la barrera placentaria y ocasionan partos pretérmino y que los niños nazcan con bajo peso.

“Nuestros programas protegen al niño, a los adolescentes y a las embarazadas de manera muy particular, sin olvidar al adulto mayor y a los discapacitados”.

¿La gingivitis puede heredarse?

—No. Los factores de riesgo la provocan y son locales, como la placa bacteriana, y forma lo que conocemos popularmente como sarro.

“No obstante, diversos padecimientos son propensos a complicar la situación, como la diabetes, pero no quiere decir que comience por esa causa”.

¿Y si la persona se cepilla bien o no y, además, fuma y bebe alcohol?

—Son factores de riesgo unidos y la situación se torna mucho más complicada, pues esas bacterias se desarrollan mejor ante la presencia de la nicotina, constituye un caldo de cultivo importante y no podemos pasar por alto el calor del cigarro, que daña de una manera tremenda como condicionante de las bacterias.

Si los síntomas en ocasiones no son tan evidentes, ¿qué hacer para que se le diagnostique a tiempo?

—Acudir periódicamente a las consultas o si percibe algún cambio de coloración en la encía; así, si le empieza una gingivitis, nosotros lo detectamos.

¿La encía sangra sin ser una enfermedad?

—No, no hay sangramiento gingival normal.

¿Hacia dónde debe dirigirse el afectado?

—Ir a su estomatólogo más cercano, él tiene las herramientas para tratarlo, no siempre debe llegarse hasta el especialista en periodoncia, solo si quien lo atiende encuentra la necesidad de remisión.

“Nuestros estudiantes terminan la carrera de Estomatología de una manera excelente desde el punto de vista teórico y práctico. El Estomatólogo General Integral (EGI) diagnostica la presencia de factores de riesgo desencadenantes de una gingivitis y esto hace que la prevención sea eficaz, y también diagnosticarla a tiempo si ya la padecen y, reitero, derivar a nuestro servicio si así lo requiere. Todo esto sucede en el nivel de Atención Primaria de Salud (APS).

“Mientras, la mayoría de las clínicas dentales de la provincia cuentan con servicio de periodoncia, tenemos una cobertura de atención excelente”.

¿Afecta a otros órganos del cuerpo humano?

—La medicina periodontal relaciona todo lo que pasa en el cuerpo con la encía, y todo lo ocurrido en la encía desfila con el cuerpo, y algunos medicamentos consumidos por mucho tiempo perjudican el periodonto.

“Los recambios hormonales repercuten y condicionan a la encía y al periodonto a una menor resistencia, y si a su vez, ya tenemos dificultades por los comportamientos abordados, estamos frente a la posibilidad de afecciones de los sistemas cerebro y cardiovasculares, del respiratorio superior, y el digestivo, en este último me detengo porque la bacteria helicobacter pylori se sienta en las bolsas periodontales y afecta el estómago, entre otras dolencias”.

¿Para terminar?

—Evitar la afección mediante una adecuada higiene. Cepillar de manera vertical con la inclusión de la encía, debe ser dento-gingival, no ingerir demasiados dulces y carbohidratos, para evitar los “momentos de azúcar”, lo cual acidifica la saliva. El equipo de atención primaria es perfecto para llevar adelante lo correcto.

¿A los pacientes?

—Si como dije, los niños y los adolescentes son los más afectados, entonces sus padres son los responsables; el Estado tiene el sistema de salud muy bien diseñado; en muchas escuelas tenemos un sillón con su estomatólogo. En Cuba, sus habitantes tienen acceso a estos servicios, sin distinción, y aunque sea dos veces al año, como mínimo, chequearse en nuestras clínicas que tienen tres turnos de trabajo, con horarios para todos.