Cuenta el secretario de prensa del presidente John F. Kennedy, Pierre Salinger, que, el mandatario, un adicto a los puros le encargó comprar la mayor cantidad posible de tabacos cubanos Petit H. Upmanns en las tiendas de Washington, y que solo cuando le informó personalmente de la adquisición de mil 200 habanos, satisfecho sacó un papel y firmó la Orden Ejecutiva 3447, que imponía el bloqueo económico, comercial y financiero contra Cuba oficializado el 3 de febrero de 1962.