“Eso es el ecumenismo, confiesa Luis Pupo, que quiere decir casa de todos. Juntos, las diferentes denominaciones religiosas tenemos muchos proyectos, y así en conjunto ayudamos y colaboramos con la comunidad donde nos encontramos”.

Luisa María señala “aquí hemos hecho ferias comunitarias, y mantenemos un hogar para tratar la adicción al alcohol. El Ejército ya tiene 100 años en Cuba y realizamos un congreso para celebrarlo junto a hermanos de otras religiones”.

“Siempre, asegura Luis, hemos tenido el apoyo y la compañía de las autoridades políticas y del gobierno; es que la Biblia es muy clara al respecto, la Iglesia está para acompañar a los dirigentes, búscalo en Romanos 13”.

Ambos habían vivido antes en Camagüey, antes de su encontrar su fe; él había pertenecido a la Policía Nacional Revolucionaria, y ella había pasado parte de su infancia en un barrio de la ciudad. Ahora regresan con un mensaje de amor y con el placer de servir.

{flike} {plusone} {ttweet}