Foto : Otilio Rivero Delgado/ AdelanteCAMAGÜEY.- A  la niña Rachel de la Caridad Castillo Trimiño, la conocí en el Colegio #1 de la circunscripción 18 en la ciudad, cuando las elecciones  anteriores y ella, pequeñita, se brindó para cuidar las urnas, mientras balbuceaba votó ante cada boleta que caía urna adentro en su turno de guardia.

Por segunda ocasión volvió al mismo colegio el pasado domingo y en este, dedicado a la segunda vuelta de los sufragios, la volví a ver en el Colegio 17 y me reconoció:

“Desde tempranito llegué –dijo y me regaló una sonrisa- y voy a estar en el horario de la mañana acá, porque me gusta ayudar en las elecciones como mi abuelita”.

Hoy la aprecié “crecidita” y es que está ya en cuarto grado en la escuela primaria  “José Cipriano de la Luz y Caballero”, con su uniforme impecable de limpio y planchado y la rojísima pañoleta de pionera.