CAMAGÜEY.- Se hace sin ánimo de lucro. Lo motiva una causa mayor. Demanda parte de tu tiempo, pero no tu dinero. Esas máximas conforman lo que se conoce como trabajo voluntario, el cual en las propias palabras de su precursor en Cuba, Ernesto Che Guevara, se define como “factor que desarrolla la conciencia de los trabajadores más que ningún otro y más todavía cuando esos trabajadores ejercen su trabajo en lugares que no les son habituales”.

 Pudiera creerse que el “invento” lo creamos los cubanos, pero algunos científicos ubican su nacimiento en la Rusia de principios del siglo XX, donde obreros voluntariamente alargaban su jornada laboral sin remuneración.

 En Cuba desde 1959 comenzaron las jornadas de trabajo voluntario. Suman unas cuantas. “Y es que no hay mejor manera de sentirnos útil”, como acotó Yulián León Rondón, miembro del secretariado provincial de la CTC en Camagüey.

 En los próximos días, 31 de marzo y 1 de abril, Cuba toda se adentrará en una jornada de este tipo para celebrar el comienzo de la segunda etapa del proceso orgánico del XXI Congreso de la CTC y de la jornada de actividades por el Primero de Mayo, Día Internacional de los Trabajadores.

 En la ciudad de los tinajones varios serán los lugares y centros de trabajo que realizarán encuentros de este tipo, pero las actividades centrales sucederán en la Unidad Empresarial de Base (UEB) Organopónico Tínima.

 “Estamos convocando no solo a los trabajadores, sino a los jóvenes también, ya que la movilización está dedicada, además, a los aniversarios 56 de la UJC y 57 de la OPJM”, sentenció el dirigente sindical.

 EL PRINCIPIO DE TODO

 El 5 de noviembre de 1959 en el Central Estrada Palma, luego conocido como Bartolomé Masó, el comandante Ernesto Guevara ideó la realización de trabajos voluntarios en apoyo a la construcción de una ciudad escolar para niños de la Sierra Maestra. El objetivo era contrarrestar la labor de elementos contrarrevolucionarios.

 La primera jornada ocurrió el 22 de noviembre, día en que, desde la cama de un camión, el Che explicó a los miles de asistentes la importancia de aquella labor. Y dijo:

 “Hoy juntos, obreros, campesinos y estudiantes, con su Ejército Rebelde, vamos a ayudar a construir la nueva Cuba. Como ayer juntos estuvimos en la lucha contra la tiranía, hoy tenemos que luchar contra los que nos quieren dividir con fantasmas, mitos y prejuicios.

 “(…) Esta escuela será un símbolo permanente de la alianza obrero-campesina donde se asienta nuestro poder revolucionario”.