Minuto a minuto con lo que acontece en Naciones Unidas #YoVotoVsBloqueo

La Embajadora de EEUU ante ONU se abstiene. “Siempre hemos votado en contra, hoy EEUU se abstiene”, dice Samantha Power, la embajadora de ese país y recibe una ovación del planeta.

El embargo, en vez de aislar a Cuba, esa política aísla a los Estados Unidos. Hemos adoptado una estrategia nueva, dice.

Es la primera vez en la historia que EEUU se abstiene. Acto seguido habla de que eso no quiere decir que no tenga crítica hacia Cuba y repite la retórica de que la Isla todavía “practica graves violaciones de los derechos humanos”.

Quiere ser la primera en reconocer lo que usualmente dice Cuba, que EEUU tiene todavía mucho que hacer a favor de los derechos humanos.

Reconocemos las áreas en que el gobierno cubano ha hecho por mejorar las condiciones de su vida, pero nada de esto significa que nos quedaremos callados cuando los derechos sean vulnerados.

Habla de un ejemplo muy conmovedor de cómo EEUU y Cuba pueden trabajar juntos para ayudar a países vulnerables en el ámbito de la salud: el Ebola. El Presidente Obama, durante la epidemia, desplegó a más de 3 000 efectivos para ir a las zonas más afectadas. Cuba envió más de 200 colaboradores de la salud,  “una colaboración excepcional”. Recuerda la historia del médico cubano Félix Sarría Báez, que fue despachado a una unidad de tratamiento especial. Pasó de ser médico a paciente. Fue transportado por aire a Ginebra, donde casi pierde la vida. Se salvó y volvió a La Habana. Todo esto se hizo con la colaboración de los Estados Unidos, Suiza y otros países. Una colaboración entre países para salvar la vida de un valeroso médico cubano.

Habla de la Brigada Henry Reeve. Cuando el doctor Báez volvió a Sierra Leona, le preguntaron por qué había vuelto. “Tenía que volver, para ayudar a otros pueblos del mundo”. Así es la ONU, cuando funciona, concluye.