CAMAGÜEY.-Trabajar en una planta de rodaje de maquinaria pesada de la Unidad Empresarial de Base (UEB) Soluciones Mecánicas (Somec) es toda una odisea, pues cada día un hombre tiene que poner su fuerza corporal al extremo para armar, desarmar, montar, desmontar y reparar una estera de cualquier tipo, ya sea de buldócer o tanque de guerra. Sin embargo, la faena más agotadora del taller mecánico, pudiera convertirse ahora en la más simple de un obrero en una jornada laboral.

La tecnología permite que en la actualidad la parte más fuerte de la obra la realice una máquina. Somec dio recientemente a los suyos la posibilidad de operar con una de las más modernas plantas de rodaje existentes en el mundo.

El país invirtió alrededor de dos millones de dólares en tres plantas de la misma característica, ubicando una en Holguín, una en Villa Clara y la otra en la capital agramontina. Con un costo de 50 5782.81 USD, la moderna maquinaria proveniente de la firma China CAMC Engineering CO.LTD es capaz de reparar el sistema de rodaje de hasta cinco equipos de las diferentes líneas de rodamiento en el mes, requiriendo mano de obra humana solo para el transporte de las piezas y el calibrado en el equipo reparador. Con un máximo de cinco trabajadores, incluyendo el jefe de brigada, puede cumplir el total de sus funciones y estar a un 100 por ciento de producción.

La entidad brinda servicios a todas las empresas que posean equipos sobre esteras. Actualmente, diferentes entidades de países latinoamericanos como Venezuela mostraron interés de reparar sus equipos en la nueva instalación.

Por el momento, solo tres obreros, capacitados para brindar un servicio de máxima calidad, reparan toda la maquinaria sobre esteras del grupo Azcuba, además de equipos pertenecientes al Miniscterio de la Construcción (Micons).

Anterior a este proyecto, Cuba tenía que comprar todo el sistema de rodaje de los equipos de ese tipo, en el mercado internacional con un costo aproximado entre 19 000 y 21 000 euros o dólares según el proveedor. De esta manera también se paraba la producción por la imposibilidad de operar con una maquinaria en óptimas condiciones. Ahora la solución está en casa y con un precio mucho menos costoso.

Está situada en una nave dividida en dos secciones, una para la parte de la reparación de esteras y otra para la de los rodillos, ruedas guías y demás accesorios. Un total de nueve equipos la conforman, además de una grúa que se desplaza de una punta a la otra de la instalación para transportar las piezas.

Según Hugo Sánchez Fonseca, jefe de brigada, aún no se tiene un proyecto de ganancias establecido. Sin embargo, por lo hecho hasta el momento, se estima que reporte a Somec entre 130.000 pesos en MN y 3 500 CUC mensuales aproximadamente.

ANTES Y DESPUÉS

CAMC no es la primera planta de rodaje que tiene Somec; hace más de 10 años dejó de operar la anterior en uso, una Maruma de procedencia japonesa.

Enrique Bourricaudy, el más longevo especialista mecánico de la UEB, comentó sobre las diferencias de ambas maquinarias:

“El nuevo equipamiento es automatizado, máquinas inteligentes con control numérico por el que el trabajo forzoso es mínimo y los operarios deben tener una preparación especializada; la anterior era mucho más manual. Al ser la china más moderna y más automatizada, es más rápida; también esta rellena los rodillos o los linkes y aquella no lo hacía.

“La velocidad depende del flujo productivo y del nivel de deterioro con que entre a nuestro taller el sistema de rodaje, porque este tiene una vida útil que es el límite para que sea factible y acepte una recuperación”.

IRMA DEJÓ SUS HUELLAS

El lugar donde está emplazada la planta, se remodeló completamente para poder instalar la maquinaria, en gran medida por las afectaciones del huracán Irma. El inconveniente suceso atmosférico dejó sin tejado la infraestructura y afectó además las paredes, marcándolas de humedad. Dada esta circunstancia se realizó una amplia inversión de aproximadamente 265 300 pesos en moneda nacional y 22 383 pesos convertibles según la oficina de finanzas de la propia unidad empresarial.

La reparación se centró mayoritariamente en la sustitución del devastado techo de tejas de fibrocemento por tejas metálicas, las cuales al paso de cualquier otro fenómeno meteorológico no se dañan al caer y pueden ser reutilizadas. Se reforzó el piso, sobre todo en las partes donde emplazaron a las máquinas de mayor peso. La pared que divide la nave en las dos secciones de trabajo se rebajó para que la grúa global pudiera moverse de un lado a otro, pues solo podía operar en una sección.

En las paredes instalaron tuberías de aire, propulsado desde el exterior hacia el interior a través de unos compresores, al funcionar la mayoría de los equipos con este recurso. Además se adicionaron nuevos baños, con todas las condiciones higiénico-sanitarias, para que los trabajadores puedan operar en un entorno óptimo.

El proyecto para la reparación de la infraestructura y su adaptación a las nuevas condiciones corrió a cargo de la Empresa de Proyectos de la Industria y la Arquitectura (EPIA 11). La Empresa de Automatización Integral intervino en el montaje de las pizarras de control y la mano de obra para la parte civil corrió a cargo de la brigada constructora.

SELECCIÓN Y CAPACITACIÓN

Tania Cano, jefa de departamento de Capital Humano de la UEB, informó que para contratar los trabajadores de la nueva planta se lanzó una convocatoria en la entidad con el objetivo de captar los interesados en ocupar alguna de las plazas. El principal requisito era que tuvieran habilidades con equipos electrónicos y conocimientos básicos de Informática.

Fueron cinco los interesados, de los cuales cuatro recibieron capacitación durante una semana por parte de  los especialistas chinos. El plato fuerte de dicha capacitación fue aprender los principales comandos a operar, puesto que las instrucciones están en su mayoría en mandarín y eso pudiera ser la mayor dificultad a presentarse en un futuro. Una vez alistados los sistemas operativos de los equipos, fueron cambiados al inglés.

Jorge García, uno de los obreros seleccionados, asegura que el idioma no es un problema y que la producción marcha sin ninguna dificultad. García además comentó: “el aprendizaje es complejo, el curso fue en muy poco tiempo, solo una semana, pero resultó muy interesante. Nos enfrentamos a una tecnología avanzada, se pueden reparar piezas que antes no, y eso nos satisface mucho, porque contribuimos a la economía del país”.

Hasta el momento Somec Camagüey cuenta en sus almacenes con gran cantidad de piezas de repuesto, las cuales se están sustituyendo en los equipos defectuosos que repara la unidad y esto facilita el trabajo de los obreros quienes por el momento no tienen que hacer un trabajo de recuperación tan profundo.

SOMEC, MÁS QUE UNA PLANTA DE RODAJE

Varios son los retos que persigue esta empresa camagüeyana en el este calendario. Dayamí Rodríguez, directora de la entidad, informó que Somec busca cumplir el plan de 6,4 millones de pesos previstos, sobre la base de los programas de reparación de los camiones KMAZ fundamentalmente. Mantener el fuerte movimiento de innovadores y racionalizadores que durante 17 años consecutivos han sido vanguardias en el país. Otro compromiso es mantenerse como colectivo Vanguardia Nacional por séptimo año consecutivo y seguir trabajando en las tareas del encargo estatal y el apoyo al territorio.