Foto: Tomada de acn.cuFoto: Tomada de acn.cuLA HABANA.- (ACN) Felices, orgullosos, comprometidos y, sobre todo, fidelistas de corazón, por convicción y hasta la médula, nos sentimos en este abril de juventud, de victorias y reafirmación revolucionaria, afirmó Susely Morfa González, primera secretaria de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC).

En diálogo con la prensa, la también miembro del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y del Consejo de Estado, felicitó a los niños, adolescentes y jóvenes y al heroico pueblo del que son hijos, en este cuatro de abril, cuando la UJC cumple 55 años de fundada y 56 la Organización de Pioneros José Martí.

Para los movimientos y organizaciones estudiantiles y juveniles y, específicamente, para su vanguardia política, estos últimos han sido años de renovación, muchísimo trabajo y transformaciones, con el propósito de actualizarse y “sintonizar” con los cambios que vive el país y perfeccionar sus bases, funcionamiento y quehacer, explicó.

Los frutos se están viendo, 2016 cerró con más de 60 mil nuevos militantes, la construcción de comités de base, principalmente en los sectores productivos, no se detiene, y hay avances en la selección y preparación de esa pieza clave que son los secretarios generales, la política de cuadros en general y cuanto atañe a la vida interna de la UJC, significó.

Sabemos que resta mucho por hacer y el funcionamiento será siempre prioridad de prioridades, pero lo logrado “hacia dentro” coloca a la organización en mejores posibilidades para la labor con todo el universo de jóvenes, incluidos los que no están en sus filas, pero a quienes debe llegar, sumar, atender y representar, recalcó.

Entre las constantes, mencionó los acuerdos del X Congreso -celebrado en julio de 2015-, cuyo cumplimiento ha devenido hoja de ruta en la promoción, por ejemplo, de más y mejores ofertas para una recreación sana y útil, de nuevos espacios para el diálogo, la reflexión y el debate, y de oportunidades para el encuentro de los jóvenes con sus raíces y mayor conocimiento de la historia patria.

Proyectos como Cuba en mi mochila y Dialogar, dialogar, las rutas históricas, los encuentros en 2016 -por primeva vez- con jóvenes trabajadores por cuenta propia y de cooperativas no agropecuarias, los muy recientes con la juventud campesina y los ya inminentes con el personal joven de la Salud Pública y del Turismo… La lista de iniciativas y acciones es larga, aseguró.

Seguiremos trabajando por una organización más propositiva, “horizontal”, atenta a todo el universo juvenil, capaz de guiarlo y representarlo, y que asegure a sus bases un protagonismo y autonomía cada vez mayores, tal y como esperan los jóvenes de su vanguardia política, puntualizó la Primera Secretaria de la UJC.

Juzgó vital para cuanto se ha avanzado y lo que falta, el trabajo mancomunado con los organismos e instituciones encargados de aplicar las políticas públicas orientadas a la formación y destino de las nuevas generaciones, bienestar, proyectos de vida, realización profesional, igualdad de oportunidades, protección de sus derechos.

Morfa González destacó el protagonismo de la juventud cubana, lo mismo en la batalla económica, que en la vida sociopolítica del país, la educación, la ciencia, la cultura, la defensa, el deporte y la salud.

Indiscutible es su compromiso con Cuba y el futuro, irrestricto es su apoyo a la Revolución. Lo vimos en el ¡Hasta Siempre! a nuestro Comandante en Jefe, lo escuchamos en ese descomunal grito ¡Yo soy Fidel!, lo vivimos cada día en el surco, la fábrica, la escuela, el hospital, en todas partes, está presente en cada potente avispero ante una provocación del enemigo, expresó.

Ese compromiso de defender y continuar esta obra inmensa, el mayor legado de Fidel, que es la Revolución, hay que refrendarlo permanentemente, e igual han de multiplicarse en cada joven la voluntad de hacer y la convicción de que todos somos Cuba y que, como nunca, la Patria necesita de nosotros, agregó.

Susely Morfa González felicitó a los “pinos nuevos” en ocasión de un día tan especial como el de hoy, que enorgullece y regocija -dijo-, pero que como nunca convoca también a reflexionar sobre cuánto más puede y debe hacer cada quien, para que por siempre haya Revolución y abriles de juventud que celebrar.