GUÁIMARO, CAMAGÜEY.- En medio de los trajines con las reses, en la competencia de ordeño que se realizó en Las Colinas guaimareñas, el muchacho delgado de baja estatura pudo haber pasado inadvertido. Pero su poca edad, menos corta de lo que aparenta, llamaba la atención.

El pequeño banco de madera amarrado a la cintura dejaba entender que nada más que la ubre de la vaca negra y robusta podía reclamar la atención de sus manos. Una y otra vez halaba de las tetas, en pares y alternadas, para que el chorro blanco y espumoso llenara lo más rápido posible el cubo de aluminio.

Entre él y Mariela (la res), nada parecía interponerse. Ellos, tranquilos, hacían lo suyo mientras que a su alrededor, fotógrafos y periodistas curiosos, vaqueros y autoridades del Partido y la Agricultura miraban expectantes.

Mariela sorprendió a todos en el doble ordeño con poco más de 16 litros de leche, ¡16 litros de leche ella solita! y se convirtió en campeona, e hizo de Darisbel Soto Pérez su triunfador, por lo que le regalaron una montura nueva de cuero para el caballo.

El muchacho tímido, con un poder de síntesis que sorprende, nos contó entonces que es ordeñador suplente en la vaquería de la Unidad Empresarial de Base El Caimito, perteneciente a la Empresa Genética Rescate de Sanguily, de Jimaguayú. Aunque allí trabaja desde hace poco más de un año, nació y se crió entre las reses, y jura que no estudió nada sobre el tema, pero de toda la familia le viene el conocimiento y el amor a la tierra y a los animales.

De las labores del ganadero, ordeñar es lo que más le gusta, y asegura que no le duelen las manos, aunque por ellas pasen al día entre 15 y 20 ubres. La vaca, Mariela, es fina, de raza 25 Siboney, nos aclara. Da buena cantidad de leche y con calidad.

Ese muchacho, que con orgullo guajiro exhibe como mejores tesoros la calidad de los animales a los que atiende, es el más joven de los vaqueros que atienden a los animales de feria en la empresa genética, sin dudas un buen augurio de la continuidad de las tradiciones ganaderas en el Camagüey.