CAMAGÜEY.- El 57 Torneo Nacional de Boxeo Playa Girón concluyó la pasada semana en el Palacio de los Deportes Rafael Fortún Chacón de esta ciudad, con la disputa del título en las diez divisiones en competencia.

El cartel final trajo tres nuevos jerarcas nacionales y ratificó a varios campeones olímpicos y mundiales como principales figuras en este ciclo competitivo.

Tras concluir la disputa de las medallas, cuando ya había pasado el sofoco, algunos campeones conversaron con Adelante Digital sobre sus actuaciones.

Damián Arce: “Estoy muy contento por volver a ser campeón nacional y más porque fue en mi tierra porque la vez anterior que el torneo se celebró aquí no tuve una buena participación y precisamente eso fue una de las cosas que me motivó a salir con ímpetu en cada pelea”.

Yosvani Veitía: “Me siento contento porque logré mi objetivo que era conseguir el octavo título nacional y ayudar a mi equipo en la tabla por puntos. Sabía que sería un torneo muy fuerte porque en Cuba hay mucho nivel en el boxeo y la exigencia es como en eventos internacionales.

Uno que hizo historia fue Osvel Caballero, quien conquistó la presea de oro en los 56 kilogramos, convirtiéndose en el primer titular nacional de la provincia de Mayabeque. “Es muy importante para mí representar a mi provincia y tengo que agradecer a Dios por lo conseguido”.

Me enfrenté a un gran boxeador, Frank Zaldívar, pero me sentía con posibilidades porque lo había derrotado en los entrenamientos. Salí muy concentrado y logré mi sueño de ser campeón”, declaró emocionado.

El príncipe del boxeo en Cuba, Lázaro Álvarez también disertó en tierras camagüeyanas, donde mostró una excelente forma deportiva, a pesar de encontrarse al final del período de competencias. “Soy un atleta que siempre se prepara bien y trato de mantener mi condición de campeón. Quiero seguir representando a Cuba internacionalmente. Los torneos en este país tienen buena calidad, pero no creo que todos los boxeadores que participan aquí, puedan triunfar en eventos que se realizan fuera, porque no poseen el fogueo necesario”.

Andy Cruz colocó otro eslabón en su impresionante cadena de triunfos que ya posee tres años iniciada. “Este torneo puede ser más complicado que un campeonato del mundo, por eso salí a ganar mis peleas sin importar quién estuviera enfrente. Es el cierre de año ideal después de haber sido seleccionado atleta del año en nuestro país”.

Roniel Iglesias hizo historia al conquistar su onceno título en estas lides, este en 69 kilogramos. “Fue una pelea difícil porque Arisnoidis es un rival muy complejo y estaba preparado, pero creo que impuse la maestría y la experiencia. Camagüey, siempre lo digo, es la mejor provincia en desarrollo del boxeo, y ganar aquí es muy importante para todo atleta. Yo me voy muy feliz porque logré mi objetivo”.

Una vez más Erislandi Savón se coronó en los 91 kilogramos, en un torneo que para él representa mucho: “Siempre reconozco al Playa Girón entre las mejores competencias del mundo, porque tenemos una gran escuela de boxeo y todos los atletas vienen a demostrar sus potencialidades. Siempre he respetado a mis rivales y los invito a que sigan preparándose, pero siempre trataré de ser la primera figura del país”.

A la sensación del evento, el local Dainier Peró, apenas le salían las palabras entre tanta alegría. “Vine mentalizado para convertirme en campeón, pero sabía que no iba a ser fácil. Creo que además de la excelente preparación que tuve para esta ocasión, me ayudó mucho el apoyo de mi pueblo, me dieron fuerzas cuando más lo necesité.

“Esto es solo un escalón en mi propósito de ser la primera figura del peso en Cuba desde ahora. Le dedico este triunfo a mi hermano, que es mi ídolo, y a mi Camagüey”, sentenció.