CAMAGÜEY.- La Copa del Mundo de Rusia 2018, si bien parece definirse en su primera ronda tras el sorteo, presenta grupos como el C, donde la batalla por dos cupos se presume muy cerrada.

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En un apartado liderado por Francia, el asunto toma ribetes interesantes; incluso la propia escuadra gala tendrá que ajustarse bien para salir airosa.

Además de la fuerte nómina europea, otra de su continente con méritos suficientes en el proceso eliminatorio, y una sudamericana que ya en el 2015 dio la clarinada con la medalla de bronce en la Copa América, no se la pondrán muy fácil. Me refiero a Dinamarca y Perú. Los de Australia competirán con menos posibilidades y analizaremos los motivos.

Desde el propio partido inaugural se pone la carne en al asador entre Dinamarca y Perú. Los dirigidos por el argentino Ricardo Gareca volverán a por el legado de aquella generación que cautivó al mundo en la incursión del Mundial de España en 1982. Un juego vistoso, rápido, dinámico, sello distintivo con la calidad de algunos de sus jugadores donde destaca su capitán Paolo Guerrero.

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El delantero del Flamengo brasilero podrá estar finalmente en el torneo tras la suspensión de la FIFA por dar positivo a un control antidoping. Será el referente en ataque de un equipo en constante evolución. Perú contará además con la experiencia en ataque de Jefferson Farfán, actualmente jugador de la Liga Rusa, pero con pasado por el Shalke 04 alemán.

La nómina tiene otras armas: sistema de juego 4-2-3-1, con jugadores por los extremos habilidosos e incisivos como Yoshimar Yotún (Orlando City, EE.UU.) y Christian Cueva (Sao Paulo, Brasil); su línea defensiva, y nombres de calibre del fútbol europeo. En los 180 minutos de la repesca ante Nueva Zelanda no permitió anotaciones, aunque por supuesto, no es ese el mejor medidor.

Eriksen es el motor del conjunto danés. Foto: Tomada de elcomercio.pe Eriksen es el motor del conjunto danés. Foto: Tomada de elcomercio.pe

En esta ocasión la tropa danesa será mucho más exigente que el cuadro oceánico. Dinamarca vuelve inspirada por la gloria y las memorias de la Euro en 1992, capitaneados en aquella oportunidad por la generación más talentosa de la historia del país, con los hermanos Laudrup y el arquero del Manchester United, Peter Schmaichael; será precisamente el hijo de este quien defienda el marco de los escandinavos.

Kasper Schmeichel ya sabe lo que es ganar la Premier League de Inglaterra, con el Leicester City; tendrá por delante una pareja de centrales comandada por el joven Andreas Christensen, del Chelsea, a quien debe acompañar Simon Kjaer, más experimentado.

Su mayor fuerza llega en la zona de la media cancha con el jugador que debe llevar el protagonismo, Christian Eriksen. El volante del Tottenham le marcó sus últimos tres goles en la repesca a Irlanda para hacer el grado para Rusia. En total, el jugador, uno de los más completos de Europa en su posición, marcó 11 goles en 12 partidos.

Los de más arriba son de armas tomar: Yussuf Yurary Poulsen, del Leipzig alemán —aunque el DT, Äge Hareide, lo coloca por derecha— es muy bueno en el juego de espaldas al arco, incluso como centro delantero, aunque no es lo más habitual en él. Pione Sisto, del Celta de Vigo español, es otro de los extremos que genera mucho peligro con desbordes. Nicolai Jorgensen (Feyenoord) debe completar el trío de los delanteros.

Tal vez la mayor preocupación para los daneses resulte su capacidad goleadora pues tiene dependencia de Eriksen, quien a su vez mueve los hilos del partido en la medular. Igual que Perú, se presentan mayormente con un esquema de 4-2-3-1; sin embargo sus volantes se mueven mucho de posición.

Foto: Tomada de eluniverso.com Foto: Tomada de eluniverso.com

La cenicienta del grupo parece a todas luces Australia, aunque en su más reciente choque amistoso lograron golear a la República Checa.

Los dirigidos por Van Marwijk no tuvieron una eliminatoria muy clara, y fueron al repechaje tras quedar a la saga de Japón y Arabia Saudita.

El nuevo técnico holandés, que llevó a la selección de su país a la final del Mundial de Sudáfrica 2010, ahora debe pensarse bien el esquema de juego, pues no hizo el proceso clasificatorio con la nómina de la “ausses”.

Lo más prominente de la escuadra será su capitán Tim Cahill, un experimentado en su cuarta Copa del Mundo. La mayoría de los jugadores australianos militan en clubes de segunda y tercera división en Inglaterra, y amén de que deben ser equipo organizado, no deben poder ante el empuje de Francia desde el mismo día 16 de junio.

La escuadra blue se erige como una de las grandes favoritas al título. Los analistas la colocan al nivel de España, Alemania o Brasil; empero los de Didier Deschamps, deberán explotar el enorme caudal y talento de cada una de sus piezas. Del colectivo lo menos sólido serán los defensores laterales, aunque siempre los galos tiene jugadores de mucho recorrido.

A pesar de la baja de Laurent Koscielny, la saga central se mantiene muy fuerte con Samuel Umtiti, y Rafael Varane; empero en el más reciente compromiso ante Italia se notaron algunas brechas.

Con un claro 4-3-3, los franceses cuentan con una medular a base de fuerza y técnica depurada con N’Golo Kante, Blaise Matuidi y Paul Pogba; mientras la delantera tiene a Antoine Griezmann como falso nueve. Los extremos deben ser puestos de Dembélé y el talentoso Kylian Mbappé. Podrían utilizar otras variantes con la entrada en la punta de Oliver Giroud, y el retraso de Griezmann a segunda línea para dar paso a un 4-4-2.

Campeones del mundo en 1998, subtitulares de la Euro que organizaron en 2016, donde perdieron en la final contra Portugal, los de la Marsellesa deben resultar ganadores de la llave. Medirán fuerzas con los que avancen por la D, en el cruce de octavos. El otro puesto se definirá en el choque entre daneses y peruanos; aunque Francia tendrá que hacerlo muy bien en el compromiso ante estas nóminas si pretende liderar la zona.