CAMAGÜEY.- El once de Camagüey volvió al campo hoy para derrotar a Isla de la Juventud 1-0 y mantener sus aspiraciones de clasificar a la fase final de la 103 Liga Nacional de Fútbol.

El gol del defensor Andy Horta bastó para que Los Miuras (16 puntos) volvieran a la senda del éxito y se colocaran nuevamente en segundo lugar del grupo, a la espera del resultado del choque entre el líder Pinar del Río (18) y Cienfuegos (14).

La buena nueva de hoy no quita el sabor amargo del desagradable acto de violencia que Los Miuras protagonizaron el pasado día 31 de marzo. Previo a esta jornada se dio a conocer que los cienfuegueros mantuvieron los tres puntos que iban ganando cuando ocurrió la riña entre atletas camagüeyanos y aficionados locales. Aunque la Comisión Nacional no ha publicado una nota oficial sobre el tema, supimos que la decisión tomada en una reunión este domingo fue otorgar la victoria a los Marineros 3-0.

Ahora los subcampeones tendrán que ganar el compromiso de la última jornada frente a los pinareños y esperar un tropiezo de los sureños para alcanzar la clasificación al siguiente escalón de la lid.

Tras el polémico abandono de los nuestros quedaron sancionados a un partido de inactividad los atletas Dagoberto Quesada y Luismel Morris, mientras los directores de ambos equipos fueron suspendidos hasta el final de la segunda etapa de la competencia.

Este redactor tuvo acceso a un video aficionado en el que se observa parte de la pelea y reconoce la pésima conducta de nuestros futbolistas. A través de la red social Facebook ellos nos comentan que durante el partido recibieron abucheos y ofensas continuas desde el público, pero para este redactor nada justifica la violencia.

Ojalá se analicen con mayor profundidad los detonantes de este tipo de hechos. Los responsables del más universal de los deportes en Cuba deberían, por lo menos, impulsar una campaña social y comunicativa contra este lamentable fenómeno, tan recurrente en las últimas ediciones de la Liga, que involucre a jugadores, técnicos y aficionados.