CAMAGÜEY.- Mientras toda la afición del país se mantiene atenta a lo que ocurre en el Cuatro Clásico Mundial, en Camagüey la pelota sigue su propia “hoja de ruta”, la misma que deberá conducirla a mejores resultados en la próxima Serie Nacional. Al menos, así lo esperan los directivos y entrenadores del deporte en esta provincia, quienes tienen ante sí el reto de lograr que los Toros embistan incluso con mayor denuedo en la próxima campaña doméstica.

Los primeros pasos en ese camino se dieron de la mano de los torneos municipales de primera categoría, y más tarde durante la temporada provincial que recién concluyó, cuyo título fue por cuarta ocasión consecutiva a las vitrinas de los Príncipes de Camagüey (nuevo récord en la historia del campeonato y su número once en las 41 ediciones ya jugadas).

En esta oportunidad se repitió la historia del año 2015, cuando los representantes de la capital agramontina también dejaron en la ruta a los Halcones de Sierra de Cubitas (ahora, el marcador final fue de tres victorias a una).

Desde el ordenamiento final de los equipos se aprecia cuánto falta por trabajar para que se vuelvan a vivir aquellas históricas temporadas de mediados de la década de 1970. Mientras Sierra de Cubitas y Minas mantuvieron su buen paso de las últimas campañas y se alinearon por ese orden en las plazas del podio, a potencias históricas como Guáimaro (octavo) o Vertientes (décimo) no les sobran los motivos para celebrar. Florida, que esta vez consiguió remontar posiciones y ubicarse en el sexto escaño, también se mantiene lejos de sus verdaderas potencialidades, tanto en resultados domésticos como en aportes a la nómina “mayor”.

Si hablamos de nuevos talentos la recién sellada Provincial fue tan pobre como respecto a su influencia entre el público. Por lo regular, quienes más dieron de qué hablar fueron los hombres ya conocidos de anteriores campeonatos, muchos de ellos con “plaza fija” en el plantel tricolor. Vale destacar, sin embargo, los buenos desempeños del veterano Marino Luis, quien regresó por sus fueros vistiendo la camiseta de su natal Carlos Manuel de Céspedes y, más tarde, la de los “capitalinos”.

Desde los próximos días un centenar de hombres –entre los que deberán contarse los de mejores desempeños hasta ahora– saldrán a la grama del “Cándido González” para intentar dar forma a los Toros de la próxima Nacional. Su oportunidad llegará como parte de la cuarta Liga Agramontina de Béisbol, que esta vez animarán cuatro equipos (la selección de la Academia y tres planteles organizados por la Comisión Provincial).

Previsiblemente, buena parte de las luces y sombras de nuestros futuros representantes podrán verse durante esos juegos, que servirán como anticipo del torneo sub-23 (a partir del 2 de abril) y el primer concentrado de la preselección a cargo del mánager Orlando González. Son los Toros que vendrán, al menos en su primera “embestida”.