CAMAGÜEY.- Los Tigres sumaron dos victorias seguidas como recibimiento al equipo de esta provincia en el inicio de la séptima subserie de la VI Serie Nacional de Béisbol para menores de 23 años, resultados que los mantuvo a la punta del Grupo C.

El pasado miércoles los camagüeyanos no pudieron llegar a tiempo al estadio José Ramón Cepero por problemas de transporte y la mala suerte continuó 24 horas después cuando los avileños le propinaron una derrota de ocho carreras por dos. Diecisiete imparables conectó la tanda felina ante los envíos de cinco serpentineros camagüeyanos, entre ellos el abridor y perdedor Erisleri Basulto. Sergio Hernández se apuntó la sonrisa individual pese a permitir las dos anotaciones de sus rivales, producidas por un cuadrangular del primera base Loidel Chapellí (hijo).

Este viernes los Tigres salieron aún más fieros al diamante y, guiados por su abridor Yairon Martínez, propinaron lechada de seis entradas a los dirigidos por Loidel Chapellí. En el momento que la lluvia obligó a terminar el choque los anfitriones habían pegado 11 indiscutibles y Martínez solo había permitido dos a los visitantes.

Sergio Guerra tuvo su tercera salida negativa después de tres exitosas y ahora tiene idéntico inventario de victorias y derrotas (3-3). El pimentoso primer bate José Ramón Alfonso Jr. Fue el héroe a la ofensiva al ligar de 3-2, con un jonrón y cuatro carreras impulsadas.

En el otro cotejo de la llave Sancti Spíritus superó en tres ocasiones a Las Tunas y se metió de lleno en la puja por el liderato, pues con balance de 14-9 están a medio juego de Ciego de Ávila (14-8). Los nuestros (10-12) se alejan peligrosamente de la lucha y los Leñadores (7-16) casi renuncian a la idea de clasificar.

Hoy habrá doble cartelera en el principal estadio avileño y a Camagüey no le queda más remedio que ganar ambos choques si aspira a remontar posiciones. Luego le restarían 12 encuentros para lograr el objetivo de pasar a la próxima fase del segundo torneo en importancia de la pelota cubana.