CAMAGÜEY.- En su debut como refuerzo en una segunda ronda de la 57 Serie Nacional de Béisbol y vistiendo el uniforme de Pinar del Río, este viernes el lanzador camagüeyano Yousimar Cousín, dominó a la temible batería de Industriales durante seis entradas y un tercio en el parque Latinoamericano.

Durante esos capítulos el jovencito de solo 20 años, convertido en uno de los principales talentos del pitcheo cubano y escogido por el rascacielos pinareño en la quinta ronda, dejó a la mejor ofensiva del campeonato en apenas 4 imparables y una carrera limpia.

Apoyado en las rectas entre 90 y 94 millas, combinadas con envíos en rompimiento, un formidable control especialmente en la zona de adentro y demostrando tal serenidad como si fuera un serpentinero experimentado, Cousín consiguió 8 ponches, la cifra más alta que logra en un partido de la actual temporada.

Mucha inteligencia mostró el agramontino en su presentación tras emplear en los cuatro capítulos iniciales toda la fuerza de su brazo en los lanzamientos de velocidad y a partir del sexto cuando sintió disminuir las millas de las rectas, sacó a relucir entonces su repertorio para mantener bien fríos los bates de los capitalinos.

Fue en la séptima entrada que un doble del mejor hombre que le conectó en el juego Wilfredo Aroche, un hit impulsor del cuarto madero Yoandry Urguellés y un batazo de Yordanis Samón capturado en la zona de seguridad hicieron explotar al abridor camagüeyano, quien nuevamente dejaba ganando un choque y veía desde el banquillo cómo el pitcheo de relevo lo perdía.

Un error en fildeo de alguien que se equivoca muy poco, Donald Duarte ahora en funciones de camarero, y otro tiro desviado del jardinero Yusniel Ibáñez, además de la inefectividad del apagafuegos Isbel Hernández, hicieron que “Los Azules” empataran el choque en el inning de la suerte, y que en definitiva se llevaran el triunfo con pizarra de 9 carreras por 4.

No obstante, el refuerzo Yousimar Cousín registró una nueva salida de calidad ahora ante el líder del campeonato, trabajo monticular con el cual reafirmó las excepcionales condiciones que lo han llevado a integrar los equipos Cuba en todas las categorías inferiores y las papeletas a su favor que posee para vestir el uniforme de las cuatro letras en el venidero Panamericano Sub 23.